El incendio originado en el campo de tiro de las instalaciones militares de Cerro Muriano está controlado, "sin fuego y sin humo", tras haber afectado a 4.100 hectáreas, de las que 2.600 pertenecen al campo de tiro, según informó ayer a los medios de comunicación el director general de Gestión del Medio Natural de la Consejería de Medio Ambiente, José Guirado.

Junto a Guirado, el delegado provincial de Medio Ambiente en Córdoba, Luis Rey, y el delegado de la Junta en Córdoba, Antonio Márquez, expusieron que aunque se espera mantener esta situación de control "toda precaución es poca debido a las altas temperaturas", que rondaron ayer los 42 grados.

El pasado domingo la Junta solicitó, bajo el asesoramiento de Infoca y ante el recrudecimiento de las llamas, la declaración del nivel dos de emergencia con el fin de contar con más medios de cobertura nacional que no estuvieran asignados a la comunidad autónoma. En este sentido, Guirado explicó que dichos refuerzos "fueron incorporándose a lo largo de la madrugada del lunes y por fin se pudo pasar de la estabilización al control de los frentes", y de este modo, "proceder al ataque de las llamas de la zona del campo de tiro".

REFUERZO DE EFECTIVOS Según un comunicado de la Subdelegación del Gobierno de Córdoba, a los efectivos del Seprona y de la Unidad Militar de Emergencia (Ume), se sumaron un anfibio de Málaga, dos helicópteros bombarderos de las bases de Cabeza del Buey (Badajoz) y Caravaca (Murcia), un avión de coordinación y observación de la base de Sevilla y una unidad móvil de metereología y transmisiones procedentes de Granada. Además, como medios aéreos extraordinarios, el Gobierno ha hecho llegar hasta Obejo un helicóptero bombardero de la base de Ibias y dos helicópteros de transporte desde el campo militar de Daroca.

José Guirado quiso hizo hincapié en el "excelente trabajo" de los 700 efectivos del dispositivo regional de Infoca procedentes de Córdoba, Almería, Granada, Jaén, Málaga y Sevilla, y explicó que, tras garantizar esta situación de control, "se continuará con las labores de refrescamiento en el perímetro afectado durante al menos dos días para garantizar la extinción definitiva".

Tras haber afectado a 4.100 hectáreas, este incendio se salda como el mayor que ha asolado Córdoba en las últimas dos décadas, ya que según datos de la Consejería de Medio Ambiente el mayor en superficie afectada se registró en 1989 con 3.086 hectáreas.