Los organizadores han realizado una primera valoración muy positiva de la cita, en la que ha participado un gran número de niños y mayores

El arraigo y la singular devoción con la que cuentan San Isidro Labrador y Santa María de la Cabeza se ha puesto de manifiesto durante este fin de semana en el encuentro nacional de hermandades de esta advocación celebrado en Fuente Tójar. Participantes venidos de distintos puntos de la geografía peninsular se han dado cita en la localidad de la Subbética en un evento que ha supuesto todo un acontecimiento social para los tojeños, que lo recordarán durante mucho tiempo.

No en vano, tras un año de preparativos, el viernes se iniciaba la recta final de una intensa programación con distintos actos que tenían como escenario Priego, entre ellos una cata de aceite, un espectáculo ecuestre y una eucaristía en honor a San Isidro y Santa María de la Cabeza en la parroquia de la Asunción. El sábado, inicio oficial del encuentro, ya en Fuente Tójar, el salón de actos de la cooperativa acogía la presentación de las hermandades participantes en el encuentro, celebrándose posteriormente una mesa redonda a la que seguía un almuerzo de hermandad que, ya en horario vespertino, daba paso a una ofrenda floral finalizando la jornada con una cena con todas las hermandades participantes.

Pero sin lugar a dudas, los actos más destacados de este noveno encuentro nacional tenían lugar ayer domingo, con la eucaristía celebrada por el obispo de la diócesis, Demetrio Fernández, a la que seguía la procesión extraordinaria de San Isidro Labrador, en la que junto a representantes de las distintas hermandades que han tomado parte en esta edición, también tomaron parte sus milenarios danzantes, que como manda la tradición, realizaron los típicos bailes en honor al santo en distintos puntos del itinerario.

Tras el desfile, la original rifa de regalos, en la que se sortearon los productos entregados en la ofrenda realizada en la ceremonia religiosa matinal, y la entrega del testigo a la hermandad de San Víctor y San Isidro, de la localidad alavesa de Gauna, que organizará la próxima edición, ponían el epílogo a este intenso y exitoso encuentro.