Demetrio Fernández apunta que Cáritas Diocesana "ha llegado a ser una red muy efectiva que atiende a 200.000 personas"

"Si Cáritas no existiera, habría que inventarla", subrayó ayer el obispo de la diócesis de Córdoba en la presentación de Cincuenta latidos de caridad , una publicación que recoge la historia de esta entidad que "empieza atendiendo a los necesidades más clamorosas y ha sabido estar cerca de las necesidades reales".

Cáritas Diocesana "ha llegado a ser una red muy efectiva que atiende a 200.000 personas", señaló el obispo, quien añadió que "a la Iglesia le interesan los pobres y esto no es de ahora; es desde hace veinte siglos". El objetivo de esta organización humanitaria es "avivar las conciencias y hacer ver que la gente que no tiene no solo está en latitudes lejanas, sino entre nosotros".

También deseó que este libro "nos recuerde a todos la urgencia del mandato nuevo del amor cristiano, organizando esta atención ante las necesidades viejas y nuevas que surgen cada día".

El libro "hace que se conozca la labor de Cáritas, que ha sido posible gracias a muchas personas", destacó su directora, Dolores Vallecillo, desde "los anteriores directivos a los casi 2.000 voluntarios", que son "la joya" de esta entidad.

El sacerdote Manuel María Hinojosa Petit, delegado episcopal en Cáritas, dijo que esta obra "es una aproximación a la vida" de esta organización y que en ella "podemos descubrir de manera vivencial el brazo solidario de la Iglesia en Córdoba para seguir siendo la Iglesia de los pobres".

Para elaborar Cincuenta latidos de caridad se ha tenido que acudir a diversas fuentes documentales, como el Archivo Diocesano, la Fundación Palacio de Viana y Cajasur, según destacó su coordinadora, Victoria Fernández.

DESDE FRAY ALBINO Así, se recogen testimonios desde Fray Albino, "que dio el primer paso para que la Iglesia acabase con la pobreza y la exclusión social", hasta el de los protagonistas de estas situaciones. Con todo esto se ha pretendido "movilizar la conciencia" en "un libro hecho desde el corazón", por el que también desfilan las historias de voluntarios y las trayectorias de delegados y directores de Cáritas Diocesana.

La Diputación ha financiado este documento. Su vicepresidenta, Felisa Cañete, resaltó que en esas páginas se refleja "la experiencia y el esfuerzo de múltiples personas comprometidas con este gran proyecto" enfocado a dar una respuesta "a las necesidades de los demás". "Vivimos tiempos muy complicados en el que las instituciones están obligadas a atender a los necesitados y colaborar con las entidades que realizan esta labor".

Cáritas Diocesana tiene como finalidad promover la acción caritativa y social de la Iglesia Católica en Córdoba, la comunicación cristiana de bienes y ayudar a la promoción humana y al desarrollo integral de la persona. Esta organización está dividida en tres departamentos que abarcan desde la formación del voluntariado y la promoción social a las campañas de ayuda.