El 2011 fue un año de contrastes en el ámbito judicial. Se registraron menos delitos, pero se dispararon las infracciones contra la intimidad y las relaciones familiares. En tiempos de crisis, descendieron los delitos contra el patrimonio y aumentaron los robos con violencia, las extorsiones y las estafas. Y mientras, se producían avances en accesibilidad y explotaba el asunto de las participaciones preferentes. Ese es el panorama descrito por los fiscales José Antonio Martín Caro (Jefe), Carmen Rubio (Menores), Borja Jiménez (Violencia de Género) y Fernando Santos Urbaneja (Civil y Consumo), que ayer presentaron la memoria de la Fiscalía de Córdoba.