La temporada que está protagonizando el equipo de Rafael Carrillo 'Falete' es para enmarcar y ya está a tan solo tres encuentros de la gloria del ascenso a Segunda División A.

Desde la humildad que ha presidido los pasos del Lucena desde que esta junta gestora tomó las riendas hace dos temporadas, esta segunda eliminatoria de la promoción de ascenso a Segunda División A ha venido a evidenciar que "Sí se puede", como cantaban los aficionados celestes en las gradas del Ciudad de Lucena cuando el brasileño Yuri marcaba el 0-1, que parecía un jarro de agua fría para los intereses lucentinistas.

Sin embargo, la fe mueve montañas y por eso el cuadro de Falete sacó la garra necesaria para demostrar que una vez más David puede derrotar a Goliat, por más que entre el Lucena y la Ponferradina haya una diferencia presupuestaria abismal.

Tuvo que ser un centrocampista reconvertido en defensa central en la presente campaña, Curro Vacas, el que de forma providencial le diese la vuelta al marcador y quién sabe si sus dos tantos son suficientes para asumir el partido de vuelta en El Tolarín con las suficientes posibilidades de dirigir a su equipo a la tercera y última eliminatoria por el ascenso a la Liga Adelante.

En las gradas se registró una entrada cercana a los 3.500 espectadores, de los que 200 habían hecho más de 800 kilómetros. desde la capital del Bierzo para ver a los suyos. Ambiente selecto y comportamiento estelar de las dos aficiones no sólo en los prolegómenos vividos en la carpa instalada en la explanada del Ciudad de Lucena, que fue una fiesta de hermandad y buen rollo, sino durante el encuentro, pese a que por momentos el colegiado valenciano Carbonell Hernández fue muy discutido por decisiones excesivamente tendenciosas a favor del conjunto ponferradino, cuyo presidente, José Fernández Nieto, es vocal de la Federación Española de Fútbol y amigo íntimo de su presidente, Angel María Villar.

Era tal la importancia del choque que el servicio de protocolo del Lucena trabajó duro para situar en el lugar preferente a cada una de las autoridades presentes en el palco. Junto al alcalde de Lucena, Juan Pérez, que llegó al término de la primera parte porque tuvo que asistir a la visita oficial a Lucena de la Consejera de Educación de la Junta de Andalucía, Mar Moreno, estuvo en primera línea el subdelegado del Gobierno, Juan José Primo, un gran futbolero, amante de su Córdoba CF, que disfrutó de forma ingente del buen juego desplegado por el Lucena. Tampoco se quisieron perder el duelo el presidente de la Ponferradina y buena parte de su consejo de administración, amén del entrenador del Córdoba, Paco Jémez, acompañado del secretario técnico, Juan Luna Eslava. Nuevamente estuvieron arropando al Lucena el vicepresidente de la Federación Andaluza de Fútbol, Pablo Lozano, y el presidente de la Federación Cordobesa, José Santiago Murillo. El veterano dirigente del fútbol cordobés, que militó durante dos temporadas como jugador del conjunto lucentinista en los años 70, prometió