Investigación cordobesa

El Imibic diseña un biomaterial que regenera córneas inflamadas sin necesidad de trasplante

El hallazgo ha aportado positivos resultados en modelos animales y el paso siguiente es que pueda adaptarse para su aprobación en la práctica clínica

El Reina Sofía llevó a cabo el pasado año 99 injertos de tejido ocular y el hospital Arruzafa ya ha realizado 2.000 desde que hiciera el primero en 1999

Yolanda Jiménez, a la izquierda, con otros investigadores del grupo del Imibic Calidad Visual.

Yolanda Jiménez, a la izquierda, con otros investigadores del grupo del Imibic Calidad Visual. / CÓRDOBA

M.J. Raya

M.J. Raya

Investigadores del grupo de investigación Calidad Visual del Imibic de Córdoba, del hospital Universitario Reina Sofía y de la Universidad de Córdoba, coordinados por Miguel González Andrades y Yolanda Jiménez, han diseñado un material inyectable que regenera córneas inflamadas y combate el virus HSV-1 (virus del herpes simple). 

Con este logro, obtenido con la colaboración de investigadores del Instituto de Bioquímica del Centro de Ciencias de la Vida de la Universidad de Vilna (Lituania), del Departamento de Oftalmología e Instituto de Ingeniería Biomédica de la Universidad de Montreal (Canadá) y del Instituto de Cardiología de la Universidad de Ottawa (Canadá), estos investigadores del Imibic persiguen evitar la necesidad de tener que efectuar un trasplante de córnea cuando se produce una inflamación de esta parte del ojo y bloquear a su vez la actividad viral en el tejido infectado. 

Un logro con muchas aplicaciones

Yolanda Jiménez expone que el próximo paso, tras los positivos resultados obtenidos con el biomaterial en modelos animales, es continuar avanzando en hacer más óptimo este producto inyectable, con el objetivo de poder adaptarlo en próximos años a la práctica clínica habitual, ya que hay que tener en cuenta que las enfermedades de la córnea crecen en incidencia porque cada vez la población vive más años, pero no todas las personas con estas dolencias pueden beneficiarse de un trasplante, por lo que es necesario buscar otras alternativas, porque la consecuencia más grave de no poder solucionar el problema es la ceguera. 

Realización de un trasplante de córnea en el hospital Arruzafa de Córdoba.

Realización de un trasplante de córnea en el hospital Arruzafa de Córdoba. / CÓRDOBA

Prometedores resultados

En este estudio se ha comprobado que este biomaterial inyectable, diseñado mediante bioingeniería por este grupo de investigadores, puede sellar y rellenar perforaciones en córneas inflamadas y promover su regeneración, evitando así la necesidad del trasplante de córnea y un alto riesgo de fracaso del injerto. El material sella la perforación y se adapta a una estructura de hidrogel sólido, explica Jiménez. Se compone de un fosfolípido artificial prepolimerizado que suprime la inflamación, de péptidos similares al colágeno que promueven la regeneración y de un pegamento modificado de citrato de colágeno. Además, esta investigadora destaca que el material incorpora un péptido de defensa antiviral que bloquea la actividad del virus HSV-1 in vitro cuando se liberó de nanopartículas de sílice.

Yolanda Jiménez resalta que el biomaterial se probó en modelos animales infectados con HSV-1 y con inflamación ocular, obteniendo como resultado la supresión de la inflamación y la regeneración de tejidos y nervios. Además, las córneas regeneradas, previamente tratadas con el biomaterial más el antiviral, presentaron características estructurales y funcionales cercanas a las de las córneas sanas normales y además estaban libres del virus del herpes simple.

La inflamación es un mecanismo de defensa natural ante los invasores. Sin embargo, una inflamación descontrolada e intensa debida a una lesión o enfermedad puede provocar daños y fallos en los órganos. Esto también se produce en la córnea humana, una estructura que forma parte de la superficie ocular, normalmente sin estructura vascular y con privilegios inmunológicos. 

Importancia de la córnea

La córnea es la parte frontal transparente del ojo que enfoca la luz que ingresa para la visión. Si se pierde la transparencia por un daño o enfermedad, el trasplante de córnea es el método más elegido para restaurar la visión. Si bien el trasplante de córnea suele ser exitoso en córneas no inflamadas debido al privilegio inmunológico del tejido, dicha ventaja se pierde como consecuencia de infecciones o lesiones graves en córneas inflamadas y que han desarrollado vasos sanguíneos nuevos.

La inflamación corneal severa o queratitis, por ejemplo, por infección del virus HSV-1, puede causar destrucción de tejido, lo que provoca ulceración, perforación y, en última instancia, ceguera. Para el tratamiento de las perforaciones corneales se viene usando pegamento de cianoacrialato, que ayuda a sellar y salvar la integridad del globo ocular. No obstante, se suele necesitar múltiples aplicaciones y un trasplante de córnea posterior para restaurar la visión.

El trasplante de córnea es un injerto muy demandado

El hospital universitario Reina Sofía llevó a cabo el pasado año 99 trasplantes de córnea y acumula desde que se realizara el primero en 1992 más de 1.770. 

El hospital Arruzafa alcanzó en 2023 los dos mil trasplantes de córnea realizados hasta esa fecha desde el primero que se efectuó en 1999, según los datos de la Organización Nacional de Trasplantes (ONT). Este hospital oftalmológico es el centro que más volumen de injertos de este tipo realiza de Andalucía y el tercero de España.

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