Sadeco ha mejorado su complejo medioambiental del Lobatón con una obra que amplía y mejora la balsa donde se tratan los residuos de desecho y que ayudará a reciclar la basura que genera Córdoba durante siete años más. La alcaldesa de la ciudad, Isabel Ambrosio, que eligió ayer las instalaciones de la empresa municipal para reaparecer públicamente después de sus vacaciones de verano, explicó que con esta iniciativa Sadeco ha vuelto a hacer «una apuesta por mejorar aún más el tratamiento» de los residuos urbanos y recordó que la ciudad «tiene entre sus prioridades no solo la recogida de residuos, sino el tratamiento de los mismos, como una responsabilidad del Ayuntamiento en la que hay que seguir mejorando como un reto importante para una ciudad sostenible».

La obra, que se ha hecho en el último mes y medio, ha tenido un presupuesto de adjudicación de 834.000 euros. A su concurso se presentaron 54 empresas y ha precisado 40 empleos para su ejecución, de los que 30 han sido trabajadores cordobeses. Actualmente la balsa tiene una capacidad de acogida de residuos de 1,18 millones de metros cúbicos y, a diferencia de otras plantas españolas donde se limitan a almacenar la basura, cubrirla de tierra y dejar que se disuelva directamente, en Sadeco lo que se hace es «compactar el residuo, para hacer un uso mejor del espacio y un tratamiento mucho más razonable y responsable», explicó la alcaldesa, junto al gerente de Sadeco, Francisco Javier Quijada, y Jesús Diz, director de Servicios Operativos.

Hace años que la empresa municipal de saneamiento ha ido adelantándose a la normativa europea de obligado cumplimiento para todos los ayuntamientos a partir del año 2020. De hecho, en Córdoba, gracias a Sadeco, cuatro años antes de esa fecha límite ya se recicla el 51% de todos los desechos que se generan. En esta línea, Isabel Ambrosio afirmó ayer que «no solo queda seguir haciendo bien las cosas, sino ir adelantándose al tiempo y lo que exige la normativa en el tratamiento de residuos, no solo la recogida». En este sentido, agradeció la colaboración de los cordobeses que con el sencillo gesto de reciclaje en sus hogares hacen posible estos avances.

Además de ampliar la balsa, se ha hormigonado el muelle de descarga y se ha mejorado la recogida de aguas pluviales y las cunetas perimetrales.