Junto a la mejora de la esperanza de vida, otro de los aspectos que definen la población de los países desarrollados es el mayor envejecimiento demográfico, sobre todo en el caso de la mujer. Paralelamente, se ha producido una disminución de los nacimientos por la baja fecundidad. La Consejería de Igualdad, Salud y Políticas Sociales asegura que se ha dado un incremento de las personas ancianas en situación de dependencia. A esto hay que unir el cada vez mayor problema de la obesidad. La Junta indica que la principal causa de mortalidad prematura en los hombres son los accidentes de tráfico, mientras que es la segunda en las mujeres.