La Brigada X organiza un ciclo de conferencias por el 50º anviersario de la creación de la escala de suboficiales y de la AGBS

Enmarcada en la conmemoración nacional del 50º aniversario de la creación de la Escala Básica de Suboficiales y de la Academia General Básica de Suboficiales, siendo la efeméride principal que celebra en 2024 el Ejercito de Tierra, la Brigada Guzmán el Bueno X de Córdoba ha organizado un ciclo de conferencias que han tenido lugar en la base de Cerro Muriano.

'Los laureados de África'

La primera conferencia, celebrada el día 10 de abril, ha contado con el doctor en historia, licenciado en filosofía y letras y diplomado en magisterio, Juan José Primo Jurado, del que cabe destacar su vínculo con la Brigada como comisario en la exposición sobre el Gran Capitán en el año 2003 y por el Premio Guzmán el Bueno en 2009, informa la BRI X en una nota de prensa.

Con el título de Los Laureados de África. Suboficiales condecorados con la Laureada en los conflictos del Rif y el Sáhara, el doctor se adentra en un "expositivo en el que define la figura del suboficial como la columna vertebral del Ejército y eslabón fundamental transmitiendo, cumpliendo y haciendo cumplir las órdenes recibidas". Así, Primo Jurado hace un recorrido por los relatos de los 14 suboficiales que, desde su creación en 1811, han sido condecorados con la más alta distinción que otorga el Ejército, la Cruz Laureada de San Fernando. Entre ellas destaca la del sargento de Infantería Manuel López Muñoz, componente del Regimiento de Infantería Córdoba 10 y que en 1913, tras caer en una emboscada el convoy de aprovisionamiento que daba protección su unidad, tomó el mando cuando el teniente pierde la vida y, a pesar de recibir dos heridas graves, logra rechazar al enemigo y conseguir la victoria.

Una mirada desde la judicatura

La segunda conferencia, celebrada el día 22 de abril, ha contado con el magistrado de la Audiencia provincial, Miguel Ángel Pareja Vallejo. Pareja es militar de carrera, pertenece a la 9º promoción de la Escala Básica de Suboficiales y aprobó la oposición a juez en el año 2000, cuando ostentaba ya el empleo de brigada de Infantería, manteniendo de forma manifiesta un vínculo y conexión con la milicia y en especial con la Brigada X.

Con el título de Desde la AGBS a la Judicatura, el magistrado ha hecho un recorrido por su vida, en tanto que militar, desde sus inicios como aspirante a la 9ª promoción de la AGBS hasta su situación actual. Con gran entusiasmo, Miguel Ángel ha descrito sus sensaciones y sus vivencias como alumno de la Básica con toda la ilusión que le había llevado a la elección de la carrera militar. Apasionado por los carros de combate, sus empleos de sargento y sargento 1º los desarrolló en una unidad de carros como era el Regimiento de Infantería Flandes 30 ubicado en Vitoria.

Allí, en una época convulsa, por el terrorismo de ETA, compaginó sus tareas profesionales como suboficial de Infantería con sus estudios de Derecho y más tarde con las oposiciones a la judicatura. Todo un reto personal que ha hecho llegar como "una historia de superación personal que en ningún momento le ha apartado de sus orígenes como militar, profesión de la que se siente parte y en la que se reafirma". En su conferencia ha trazado un paralelismo que no puede disociar en su vida personal entre la milicia y la judicatura desde las que ha "practicado y defendido siempre unos valores intrínsecos a ambas profesiones y que ha exaltado como línea de conducta a seguir".