De las 23 convocadas no está claro si acudirán o no a la llamada de la selección. 15 son campeonas del mundo y dos jugadoras, Mapi León y Patri Guijarro, ya se rebelaron y no fueron al Mundial de Australia. Además, la nueva seleccionadora deja fuera a Jenni Hermoso, la protagonista involuntaria del caso Rubiales, según ella, para protegerla. Ivana Andrés, la capitana que no está convocada por lesión, insistía en las reivindicaciones de las jugadoras. Mientras, el resto de sus compañeras guardan silencio y la Federación da a entender que sí acudirán. Habrá que esperar al mañana para ver qué jugadoras deciden ir a la concentración. Si no lo hacen se enfrentan a una suspensión federativa de entre dos y 15 años, una multa entre 3.000 y 30.000 euros y la prohibición de acceso a los estadios de hasta cinco años.