El diestro José Ortega Cano ha anunciado que piensa retirarse del toreo "definitivamente a final de esta temporada". A la vuelta de la plaza en la localidad francesa de Maugio, donde volvió a sentirse torero importante por una faena grande, en la soledad del hotel tomó la decisión de decir adiós al toreo activo. "Ha sido una corazonada, pensando en mi gente, mis hijos, mi madre, mi mujer, incluso en mí, en mi carrera", explicó el torero en la madrugada de ayer.

Ortega descolgó el teléfono para comunicárselo, por este orden, "a mi madre, a mi mujer Rocío y a mi apoderado Manolo Martín. Ahora ya los saben también ustedes, los periodistas, los cuartos en enterarse. Pueden dar la noticia desde Efe a toda España y al resto de países taurinos".

DECISION IRREVOCABLE

El diestro insistió en que "la decisión es irrevocable. Y quiero advertir que la tomo sin haberlo pensado mucho, pues si le hubiera dado más vueltas tal vez mi afición y ganas de torear me frenan. Había que dar el paso adelante, y ya está. Y conste que no me arrepiento de nada, al contrario, me voy, me quiero ir con la cabeza muy alta".

"Estoy tranquilo --continuó-- porque nadie podrá hacer una lectura malintencionada de esta decisión, que anuncio cuando ya están las ferias hechas y cuando yo todavía tengo unas veinte corridas contratadas para disfrutar. Que al fin y al cabo lo que quiero es disfrutar de lo que resta, quedarme con buen sabor".

Ortega tomó la alternativa en Zaragoza el 12 de octubre de 1974 y en octubre de 1998 se retiró por primera vez de los ruedos. Estuvo sin torear las temporadas de 1999 y 2000, y otra vez en activo los tres últimos años. "Dios ha estado generoso conmigo en todo este tiempo", enfatizó. "El toreo ha sido para mi mucho más que afición, una pasión. Y me ha dado cosas buenas, más cosas buenas que de las otras. De verdad que he sido un afortunado. Ahora sólo me falta poder despedirme con la categoría que merece también mi trayectoria, quizás en El Pilar de Zaragoza, o el 12 de octubre en Sevilla...", finalizó.