Clece, la empresa que protege para cuidar

Ayudar a las personas dependientes es una tarea muy gratificante y humana, pero debido a la situación actual se ha convertido en una actividad que conlleva un riesgo, tanto para los profesionales que desempeñan esta labor como para las personas usuarias que reciben la Ayuda a Domicilio.

Por ello, y como la cosa va de cuidar, Clece no ha reparado en medidas para proteger a las personas que cuidan y así garantizar toda la seguridad posible de sus auxiliares frente a contagios de COVID. Tanto es así que esta empresa ha contratado a una enfermera que se dedica exclusivamente a realizar test a sus empleados en la provincia de Córdoba. Isabel Fernández lleva unos meses prestando este servicio y ya ha realizado más de 900 test. Isabel asegura que se siente muy orgullosa de cómo Clece cuida de sus trabajadores y trabajadoras, y cómo gracias a esto “las personas que trabajan en esta empresa se sienten protegidas".

Encarni García es Auxiliar de Ayuda a Domicilio en el municipio de Rute y afirma que, desde que comenzó la crisis sanitaria, Clece se ha encargado de formarle y asegurarse de que esté protegida frente a la COVID. Como resultado, realiza su trabajo de manera segura y con más confianza y, además, en sus propias palabras, “las auxiliares no solo estamos más tranquilas, sino que también enseñamos a las personas usuarias qué medidas deben tomar”.

Más de mil horas de formación para los empleados ha sido una acción clave de Clece a la hora de afrontar la crisis sanitaria e incrementar su seguridad. Pero a esta medida le ha acompañado la entrega de todos los elementos de protección necesarios. Concretamente, desde el comienzo de la crisis, se ha hecho entrega, para 370 auxiliares y más de mil personas usuarias, un total de 2000 batas desechables, 750 delantales protectores lavables, 194.582 mascarillas y guantes a disposición del personal a demanda.

Una empresa preparada para casos de riesgo. Gracias a estas medidas y a la correcta protección de sus empleados, Clece ha podido hacer frente a la petición de las instituciones de atender a personas en situación de dificultad a causa de la COVID. Es el caso de la iniciativa llevada a cabo por el Instituto Provincial de Bienestar Social de la Diputación de Córdoba (IPBS), que propuso una modificación del Programa de Ayuda a Domicilio para adaptarlo a la extraordinaria situación que estamos viviendo. De esta manera surgió la “Ayuda a Domicilio Emergencia Covid-19”, destinada a atender casos de emergencia derivadas de la extrema gravedad de la pandemia provocada por el coronavirus, como es el caso de usuarios contagiados o incluso personas que, una vez contagiadas, pasan a ser dependientes al no poder ser atendidos por familiares.

Resulta innegable afirmar que existe cierto respeto a la hora de realizar este trabajo sabiendo que el virus está presente, pero el empeño de Clece por formar a sus empleados y mantenerlos protegidos ha hecho que éstos estén tranquilos al sentirse preparados y a salvo para realizar su trabajo bajo estas condiciones. Encarni asegura que no siente miedo, solo cierto respeto, pero que lo que más le duele es “la impotencia de no poder tratar a estos usuarios con la cercanía con la que me gustaría”. Y es que la profesión de auxiliar tiene un componente humano muy acentuado y en Clece, sus auxiliares llevan su vocación por bandera.

Además de atender a aquellos usuarios del SAD que han contraído el virus, Clece ha aceptado de manera orgullosa, impulsado por este programa del IPBS, atender también a personas contagiadas que no eran previamente usuarias de este servicio pero que, tras su positivo en COVID, se encuentran desamparadas al no poder ser auxiliados por sus familiares. Se trata de usuarios “temporales” que reciben este servicio durante los 15 días que dura su confinamiento por contagio.

Y para aumentar aún más la seguridad de sus empleados, Clece ha incrementado la periodicidad con la que realiza los test de antígeno viral. Con la nueva situación, a aquellas auxiliares que están atendiendo a usuarios con COVID, se les realiza un test semanal, para que de esta forma tengan dos controles en el transcurso de la atención a estos usuarios.

Entender la situación de excepcionalidad que todos estamos viviendo y velar siempre por la seguridad son las premisas que han llevado a Clece a realizar, gracias a la profesionalidad de sus auxiliares, un servicio seguro y de calidad que está ayudando a decenas de usuarios a pasar de la mejor manera posible esta crisis sanitaria que está afectando a la población mundial.