Como en la famosa película, vivimos días de "vino y rosas" que unen a cientos de personas en la cata de Córdoba. Me perdí la inauguración viviendo y bebiendo otra clase de vinos, los de Requena donde se ha celebrado el XI Encuentro Nacional de Cofradías Enogastronómicas. Ciudad valenciana que en tiempos lejanos formó parte del Reino de Castilla. Ciudad con la Fiesta de la Vendimia más antigua de España. Visitamos el yacimiento arqueológico milenario de Las Pilillas que según nos dicen, ahí entre los siglos VII y V a. de C. estuvo la primera bodega española. En el Museo del Vino se celebró la Asamblea General de Fecoes. Es un edificio del siglo XV que según la leyenda habitó el Cid Campeador. Lugar histórico el de esta cueva bodega con tinajas antiquísimas y prensas centenarias. En estos Encuentros --el anterior se celebró en Córdoba-- se entregan los habituales premios relacionados con la artesanía culinaria. Andalucía, y concretamente la provincia de Córdoba, logró tres. A la mejor cofradía, la de los Amigos del Olivo de Baena. A la mejor elaboración tradicional del aceite de oliva, a Sucesores de Hermanos López de Luque. A la mejor elaboración artesanal de sal, a Gabela de Sal de Albendín. El Circulo de Enófilos Utiel- Requena, cofradía anfitriona del Congreso a la que pertenece el presidente de Fecoes, Carlos Martín Cosme, nombró varios cofrades de honor; entre ellos a José Manuel Tutau de la Cofradía de Amigos del Olivo. Aparte de la exhibición agroalimentaria en el Patio de Armas del Castillo, degustamos los vinos de la moderna bodega Coviñas.

* Periodista