El concurso de vinos ecológicos EcoRacimo 2019, que organiza la Diputación de Córdoba junto a Ecovalia y al Ayuntamiento de Montilla, celebrará los próximos 3 y 4 de junio su vigésima edición en el castillo de El Gran Capitán con un formato renovado dirigido a dotar de una «mayor internacionalización» a este certamen y, al mismo tiempo, favorecer la promoción de los vinos ganadores.
El presidente de Ecovalia, que presentó esta nueva edición junto al alcalde de Montilla, Rafael Llamas, y al nuevo coordinador general del concurso, Miguel Ángel Benito, destacó que EcoRacimo refuerza su equipo «para elevar el concurso a los más altos niveles» y, de esta forma, reflejar los buenos resultados que se vienen registrando en el sector ecológico, «cada vez con más presencia entre los consumidores».
En esta línea, el nuevo director de EcoRacimo señaló que las novedades que se plantean pretenden «despertar a este gigante dormido» para llegar hasta el consumidor final y convertirse «en todo un referente» para el sector del vino ecológico. «Nuestro objetivo es que EcoRacimo, y Montilla, como municipio que siempre ha apostado por esta peculiaridad, sea un referente en toda España, para lo que se va a realizar una gran labor de difusión y promoción en certámenes como Fenavin, el Salón Gourmet o Prowein», adelantó Benito.
Un trabajo que, asimismo, también se trasladará una vez haya finalizado el trabajo de los profesionales catadores -que este año procederán de todas las zonas vinícolas de España-, con un «arduo trabajo» de promoción.
«Queremos que ganar EcoRacimo tenga una repercusión de cara a las ventas de estos vinos, por eso se está trabajando con grandes empresas de distribución para que los ganadores estén en los lineales de los comercios y facilitar el acceso al consumidor», indico el coordinador de un concurso que, este año, pretende superar los 200 participantes.
«EcoRacimo va a dar un salto cualitativo y cuantitativo», aseguró, por su parte, el alcalde de Montilla, quien agradeció la apuesta de la Diputación y Ecovalia, así como de empresas como Bodegas Robles y Seipasa, por «impulsar los vinos ecológicos».
