No importa que sea día laborable, que haya partido de Champions o que juegue a las 21.00 horas de la noche... Cuando el Córdoba Patrimonio juega en Vista Alegre algo se activa en el aficionado cordobés, ya sea cordobesista o un amante del fútbol sala, que le saca una sonrisa durante todo el día porque, más allá del resultado, sabe que va a ver un partido digno de la mejor liga del mundo.

Los jugadores salieron de inicio con ganas de reivindicarse ante su técnico y «perder el respeto» a un clásico como es ElPozo Murcia. Eso desde el primer minuto contagió al público, que animó a sus ídolos de blanco y verde. Al igual que en la visita de Movistar Inter, varios integrantes de la Agrupación Musical Santísimo Cristo de Gracia pusieron la música a ritmo de charanga para generar más ambiente y evitar que la caldera se enfriara con el paso de los minutos.

Hubo un momento para la emotividad durante el minuto de silencio por uno de los cordobeses fallecidos esta semana en accidente de tráfico. Tras ello, el ambiente de fiesta volvió a reinar, aunque ElPozo trató de aguarlo rápidamente con los tres goles que consiguió en los primeros seis minutos. Ese ambiente, pese a ello, seguía pero era empuje y garra para despertar a unos jugadores que querían activarse en el encuentro.

El descanso le sentó mejor no solo al equipo, sino también a una grada que veía cómo el Córdoba Patrimonio tocaba el balón y se mostraba sin complejos ante un subcampeón de Liga y de Copa de España. Y aunque el gol en propia puerta de Lolo Jarque hiciera casi imposible la épica, la garra y el esfuerzo que mostraron los jugadores blanquiverdes sobre la pista mantuvieron el entusiasmo de un público que veía cómo su equipo iba a morir, en este caso, con las zapatillas puestas, una de sus principales señas de identidad. Una intensidad que sufría Giustozzi desde la banda, que no paraba de gesticular. Al final, los tres puntos volaron hacia Murcia pero, una vez más, la ovación fue unánime y efusiva para unos jugadores del Córdoba Patrimonio que, a buen seguro, seguirá activando el positivismo de la gente con su garra.