Escasas reservas hoteleras y de casas rurales, cancelaciones y poco movimiento turístico son las primeras conclusiones que se extraen de los primeros días tras la apertura de las provincias andaluzas en la nueva fase de desescalada por la segunda ola del coronavirus en la zona norte de Córdoba.

En Los Pedroches, los alojamientos rurales, que en otras ocasiones se reservaban para Navidad con meses de antelación y con gran demanda, se encuentran con muy pocos ocupantes, con reservas de estancias cortas y con muchas viviendas sin reservar. Así lo señala el gerente del Centro de Iniciativas Turísticas y Empresariales (CIET), Juan Manuel Ruiz, que explica que el pasado año y en años precedentes la ocupación fue del 100%, «por lo que la situación actual no la había visto jamás». Por otra parte, señala que muchos de estos alojamientos están pensados para grupos amplios de personas, «y con la limitación a 6 o a 10 personas es posible que no se lleguen a cubrir gastos, por ejemplo, de calefacción, chimenea y leña».

Algunos de los alojamientos han sido reservados por los propios habitantes de la localidad en la que se ubican, y todo ello tras un otoño en el que no ha habido visitantes durante los puentes.

En el Guadiato la tónica es la misma, con un aumento de las cancelaciones y una caída de las reservas en las casas rurales. El presidente de la asociación ERA Guadiato y miembro de Emcotur, Francisco Linares, explica que hasta el próximo día 1 de enero, únicamente una casa con capacidad para diez personas -que ocuparán seis- está reservada para fin de año y dos cuentan con una pre-reserva, condicionada a la movilidad y al número, para el día 31 de diciembre. Para los días de Navidad tampoco hay.