La organización agraria Asaja Córdoba llegó ayer a un acuerdo con UGT y CCOO ante el Servicio Extrajudicial de Resolución de Conflictos Laborales de Andalucía (Sercla) sobre la implantación de la subida del salario mínimo interprofesional (SMI) en el sector agrario.

El acuerdo reconoce para los trabajadores eventuales un salario mínimo interprofesional de 45,65 euros por día, de forma que para aquellos trabajadores eventuales que, con el salario de las tablas y los complementos salariales que en su caso procedan, no lleguen diariamente al salario mínimo interprofesional, se aplicará un complemento personal de carácter individual, no consolidable, de importe equivalente a la cantidad que sea necesaria a fin de garantizar que alcancen el salario mínimo de 45,65 euros por día.

En cuanto a todos los trabajadores fijos y fijos discontinuos, se reconoce un salario mínimo interprofesional de 1.050 euros al mes brutos con las pagas extras prorrateadas, o de 900 euros al mes brutos sin las pagas extras incluidas.

Asimismo, en el Sercla se acordó que aquellos trabajadores fijos o fijos discontinuos cuyo salario en tablas más las pagas extraordinarias, paga de beneficios más los complementos salariales que en su caso procedan no lleguen mensualmente al SMI, cobrarán un complemento personal de carácter individual, no consolidable, del importe equivalente a la cantidad que sea necesaria para garantizar el salario mínimo de 1.050 euros al mes brutos con las pagas extras prorrateadas, o de 900 euros al mes brutos sin las pagas extras incluidas.

El resto de condiciones del convenio de campo siguen siendo la mismas del firmado para el periodo 2017-2020.

Asaja Córdoba ha afirmado en un comunicado que considera que la imposición de un nuevo salario mínimo interprofesional por parte del Gobierno de Pedro Sánchez «no es positiva para el sector agrario, al subir los costes en unos momentos de grave crisis de precios para muchos sectores y, además, ha roto los acuerdos adoptados en la negociación colectiva, basada en la buena voluntad de la patronal y los sindicatos». No obstante, la organización agraria se muestra «consciente de la necesidad de cumplir la legislación mientras esté en vigor» y, por ello, «ha hecho un ejercicio de responsabilidad para adaptar el convenio del campo a la nueva normativa».

Así, Asaja hace una valoración positiva del acuerdo alcanzado en el Sercla con los sindicatos UGT y Comisiones Obreras al conseguirse «con la voluntad de todos y el esfuerzo llevado a cabo por ambas partes para conseguir la mejor solución adaptada a la realidad del sector».

Por su parte, los sindicatos CCOO y UGT mostrado en un comunicado conjunto su satisfacción por que su lucha «haya tenido efecto y este acuerdo haya llegado antes de la vía judicial». No obstante, recuerdan que el incremento salarial debe llevarse a efecto con carácter retroactivo, ya que la implantación del nuevo salario mínimo está decretada desde el pasado 1 de enero.