Los Príncipes de Asturias inauguraron ayer el nuevo gasoducto Huelva--Sevilla--Córdoba--Madrid, una de las principales infraestructuras de Enagás, y la estación de compresión de Villafranca de Córdoba, el punto central más importante de la red gasista española. Tras el acto, los herederos al trono español se desplazaron a la capital cordobesa, donde almorzaron en Bodegas Campos, visitaron la exposición de Joaquín Sorolla en la sede de Vimcorsa y asistieron a una conferencia de Antonio Gala en el Alcázar de los Reyes Cristianos, que abría el Año de la lectura en Córdoba.
En la inauguración de la infraestructura gasista, Don Felipe y Doña Letizia estuvieron acompañados por el ministro de Industria, Turismo y Comercio, José Montilla; y los presidentes de Andalucía, Manuel Chaves, y de Castilla--La Mancha, José María Barreda, además de numerosos representantes políticos y directivos de la empresa Enagás.
El ministro destacó que el gasoducto inaugurado ayer "es importantísimo para el sistema gasístico español, uno de sus ejes estructurales", y aseguró que este sistema "está preparado para atender los incrementos de consumo" de gas que se están produciendo en España, "incluso cuando se producen incidentes en el suministro procedente de otros países". El titular de Industria señaló que el consumo de gas natural creció un 16% en 2004 y está previsto un incremento de la demanda del 17% en este año.
IMPORTANTE PROYECTO Por su parte, el presidente de Enagás, Antonio González--Adalid, afirmó que el gasoducto "es uno de los más importantes proyectos realizados por Enagás" y comentó que la puesta en marcha del gasoducto y la estación de compresión de Villafranca "contribuyen a asegurar el suministro de gas natural en el centro de España y el sistema gasista peninsular en su conjunto".
La nueva red de transporte de gas entre Huelva y Madrid tiene una longitud total de 636,5 kilómetros y un diámetro de 762 milímetros en el tramo de Huelva a Córdoba y de 813 milímetros entre Córdoba y Madrid. El gasoducto atraviesa 71 términos municipales, de los que 10 son de la provincia de Córdoba, y el resto se reparten entre Huelva, Sevilla, Jaén, Ciudad Real, Toledo, Cuenca y Madrid.
Esta obra ha supuesto una inversión de 344,4 millones de euros, a los que se suman los 80,3 millones de euros que ha costado la estación de compresión de Villafranca, que, según el director general de Infraestructuras de Enagás, Javier González, "es el punto central más importante de la red gasista española y posiblemente lo seguirá siendo por muchos años".
En esta estación confluyen seis gasoductos que vienen de distintas partes del país y su función principal es "dirigir el tráfico del gas", señaló Javier González, y aumentar la presión del combustible dentro de los gasoductos. La estación cuenta con cinco compresores y es capaz de vehicular hasta dos millones de metros cúbicos de gas por hora.
