La Comisión Europea ha anunciado este martes una ayuda adicional de 22 millones de euros para ofrecer asistencia humanitaria a las víctimas del conflicto en Malí, lo que eleva a un total de 115 millones de euros los fondos comunitarios liberados desde 2012. En concreto, la ayuda servirá para costear el abastecimiento de alimentos y el suministro de servicios básicos en todo el país, en donde la población ha sido golpeada por una "triple crisis" que arrancó con una crisis alimentaria por la sequía y siguió con la inestabilidad política y el posterior conflicto en el norte, según recuerda la comisaria de Ayuda Humanitaria, Kristalina Georgieva.

"Nuestra prioridad primera en Malí es estabilizar la muy frágil seguridad alimentaria, que se ha visto agravada por el impacto del conflicto", ha insistido Georgieva, que ha alertado de que cerca de un millón de personas están en situación de emergencia alimentaria en el norte del país.

Además, cerca de 167.000 personas han huido a países vecinos y hay otros 227.000 desplazados más dentro del país que han escapado de la violencia del norte, en donde la situación alimentaria va "de peor en peor".

Sólo en 2013, Bruselas ha movilizado 42 millones de euros en ayuda humanitaria para Malí, aunque, desde el año anterior, la contribución comunitaria se eleva hasta los 115 millones de euros.