El español de Caisse D´Epargne Alejandro Valverde logró ayer la victoria en la tercera etapa de la Vuelta Ciclista a Castilla y León, entre Sahagún (León) y el Alto de San Isidro (156 kilómetros), al parar el crono en 3.28: 16.

Por su parte, el ciclista del Andalucía Cajasur Javi Moreno entró en una más que meritoria tercera plaza.

El Caisse D´Epargne trabajó a destajo en los kilómetros finales para Valverde, quien se colocó en una posición privilegiada y a escasos doscientos metros de la meta y, tras resistir el empuje del español Contador y el ruso de Rabobank Denis Menchov, lanzó un ataque demoledor que le hizo cruzar la meta en solitario. No obstante, el estadounidense Levi Lepheimer, de Astana, sigue líder.

El día, desde que la etapa salió de Sahagún (León), transcurrió apacible, con un sol espléndido y nada de viento. Así, el pelotón corrió junto en los primeros compases, salvo un par de ataques que no fructificaron, y con el equipo Astana tirando del grupo y manteniendo un ritmo implacable.

El Alto de San Isidro (León) les esperaba cien kilómetros más adelante. Un puerto de segunda categoría cuya dureza, a excepción de un kilómetro y medio, dejaba bastante que desear, con bastantes toboganes.

Había velocidad e ímpetu guerrero. Algo que se pudo comprobar cuando, sobre el kilómetro ochenta de carrera, antes de atravesar Santibañez del Porma, diez espadas saltaron del pelotón para protagonizar la escapada de la jornada.

Pero de todos ellos, sólo Raúl Santamarta, de Burgos Monumental, siguió al frente de una fuga que se completó con otros cinco corredores.

La diferencia con un pelotón en el que bregaban Haimar Zubeldia y José Luis Rubiera, de Astana, apenas aumentó, por lo que se vaticinaba que la fuga moriría. Así, a falta de cinco kilómetros para la meta, el Caisse D´Epargne empezó a trabajar para que uno de sus figuras se llevase la etapa. Entonces se produjo el carrusel de ataques que Valverde aguantó hasta ganar.