Cuando le preguntan a Paco Montalvo acerca de su situación durante el confinamiento responde con una humildad apaciguadora. «Estuve tranquilo e hice música solamente cuando me apetecía. Me ha venido bien el parón porque he aprendido a valorar cosas a las que antes no daba importancia», declara el violinista. Claro que la cancelación de los más de cincuenta conciertos que tenía programados en España y el extranjero con motivo de la gira de su último disco, Leyenda, supuso una complicación personal que, mirado con la perspectiva de los meses, no ha restado brillantez a su carrera. Este agosto el Festival Internacional Cante de las Minas de La Unión, en Murcia, se rendía ante la maestría de Montalvo. Sorprendieron su primera composición y sus referencias a Camarón dentro de un disco que ha sido líder en ventas en Amazon y ya acumula miles de reproducciones en las plataformas. Algo sorprendente tratándose de un instrumento clásico, de su innovadora incorporación al flamenco.

«Noté mucho el calor del público, sus ganas de disfrutar», explica el artista, que está ansioso por ver cómo sus nuevos planes se materializan. Después de haber colaborado con El Pele en Leyenda, ha asumido sin dudarlo el proyecto de producir él mismo el último disco del cantaor cordobés, cuyo título todavía no puede revelar, aunque adelanta la publicación del tema Patriarca, el 1 de octubre, como primer sencillo, anticipo de este álbum. «Trabajar con El Pele, después de que llevase tanto tiempo sin que publicase nada, ha sido muy bonito, tenía muchísimas ganas», comenta el violinista, como si el volumen de trabajo, la responsabilidad, que requiere la producción completa de un disco de flamenco, no fuera motivo de preocupación. Pero Paco Montalvo respira duende. Trabaja movido por la pasión o más bien la pasión trabaja por él. «Solo espero que a la gente le guste porque El Pele es un grande del flamenco y hay que estar con él», declara, emocionado ante la posibilidad de compartir escenario con un referente al que admira, para interpretar juntos la colaboración que ambos incluyen en este nuevo álbum de Manuel Moreno Maya. «Me gusta rodearme de grandes maestros y si puedo disfrutar con alguno de ellos en el escenario seguro que lo haré», explica Montalvo. Luego pone la vista en su ciudad, en el concierto que prepara junto al Ayuntamiento para diciembre, en la Mezquita-Catedral. Le hace una ilusión «tremenda» acariciar su violín frente al público de su Córdoba, con el que se reunió por última vez en 2017. El 24 de septiembre toca en Ronda. Desde este diario le llaman maestro. «Prefiero que eso lo digan los demás, yo solo disfruto de lo que hago», responde por teléfono.