El alcalde de Puente Genil, Esteban Morales, ha reconocido que el plan puesto en marcha para reducir la población de palomas en no ha surtido todo el efecto que se esperaba. Así, apuntó que se ha producido una proliferación de palomas en el casco urbano y ya no están solo circunscritas al barrio bajo, como había sido tradicionalmente.

Morales dijo que «los palomos vienen a un sitio que no está habitado» por lo que «el acceso para eliminarlos es difícil». Esa situación es especialmente preocupante «en el casco histórico, donde hay muchas casas deshabitadas a las que no podemos acceder», manifestó. Ante este escenario, Morales dijo que se va a revisar el contrato firmado con una empresa para la capturas de estas aves.

Se trata de un acuerdo que consiste en la instalación de jaulas, que las capturan. «Es verdad que estamos teniendo mucha captura pero aún así seguimos teniendo palomas». Por ello, a partir de ahora «vamos a hacer una revisión del contrato, con la empresa y la persona que contratamos de la Universidad de Córdoba, para que nos hagan una valoración de todo el trabajo que se ha hecho».