Incertidumbre y malestar. Esas son las dos palabras más repetidas entre los vecinos y comerciantes de la Puerta de Aguilar, tras conocer los detalles del proyecto de reurbanización de la vía, una de las principales de Montilla. Y es que, al igual que ha ocurrido con la reforma del acerado de la avenida de Andalucía, que en estos días encara su recta final, el equipo de gobierno que dirige Rafael Llamas ha contemplado nuevamente la supresión de plazas de aparcamiento a lo largo de la calle, donde se ubica la Casa Consistorial.

Las obras permitirán, en su primera fase, remodelar uno de los acerados de la Puerta Aguilar, en el tramo que discurre entre la Ronda de Curtidores y la Corredera y darán comienzo «previsiblemente» el próximo mes de julio, con un plazo de ejecución de ocho meses, tal y como se trasladó a comerciantes y vecinos de la zona durante el transcurso de una reunión con técnicos de Urbanismo y con los responsables de gestionar los fondos europeos de la Estrategia de Desarrollo Urbano Sostenible e Integrado (Edusi) Imagina Montilla.

Tal y como avanzó CÓRDOBA, el objetivo de esta actuación se centrará en la mejora de la accesibilidad y de la movilidad urbana en la calle. Para ello, en una primera fase adjudicada por un importe de 612.000 euros a la empresa sevillana Carmocon –la misma que asumió la reurbanización de la Corredera– se actuará únicamente en el acerado izquierdo en el sentido del tráfico, con el objetivo de evitar el cierre de la vía.

Además de la supresión de nuevas plazas de aparcamiento en una calle que fue de las primeras en contar con zona azul, las principales reivindicaciones trasladadas por los comerciantes se centran en aspectos como la ubicación de las futuras zonas de carga y descarga, con el objetivo de evitar en lo posible que las mismas se localicen en espacios que dificulten la visibilidad de los establecimientos comerciales.

A su vez, varios comerciantes han reclamado al equipo de gobierno la aplicación de bonificaciones para el uso de los aparcamientos públicos por parte de los clientes de los comercios de la zona, «para paliar la pérdida de casi 50 plazas de aparcamiento que supondrá esta remodelación».

La «unificación estética» de la Puerta de Aguilar con la imagen que ofrece actualmente la calle Corredera se plasmará en la utilización de granito en el nuevo acerado, que ampliará sus dimensiones para favorecer la movilidad de los peatones en una de las vías más transitadas del casco histórico e, igualmente, para permitir la instalación de nuevo mobiliario urbano y de elementos de jardinería a lo largo de todo el trazado, además de la renovación de las infraestructuras urbanas.

La intervención proyectada por el Ayuntamiento de Montilla se desarrollará en varias fases y contempla también la remodelación del espacio diáfano que da acceso a la Casa Consistorial, un importante enclave cervantino en el que se desarrolla parte de la trama de ‘El Coloquio de los Perros’. El edificio, mandado levantar por el marqués de Priego en 1651, fue utilizado por las tropas napoleónicas durante la invasión francesa y en 1835 estuvo afectado por la desamortización de Mendizábal.