La tradicional "Candelá" que los vecinos del barrio de La Cruz dedican a San Sebastián, en los últimos días del mes de enero, congregó la noche del pasado viernes a cientos de paisanos en torno al fuego y a los elementos que caracterizan la identidad de esta devoción vinculada al invierno, al fuego y a la convivencia festiva representada por el vino y la gastronomía popular. El pan, el vino y el aceite, los tres alimentos emblemáticos de la dieta mediterránea están presentes en "La Candelá" de cada año y son consumidos gratuitamente por todos los asistentes a la fiesta que fue recuperada hace años y que tiene una gran antigüedad.

En esta ocasión, el buen tiempo ha animado a cientos de montillanos para asistir a esta fiesta popular ubicada en el LLanete de la Cruz, un marco emblemático en el que las tradiciones populares de todo el año tienen reflejo propio. La imagen de "La Candelá" está vinculada, en los últinos años, a la largas varetas de olivo en las que se ensartan los chorizos que revientan con el calor del fuego.

La fiesta mantiene su sentido religioso con la devoción al santo mártir abogado contra las epidemias . La Hermandad del Santísimo Cristo de la Misericordia y la propia parroquia organizan a lo largo de toda la semana, los tradicionales cultos a San Sebastián.