El servicio provincial de ayuda a domicilio coordinado por la Diputación de Córdoba generará un total de 1.240 empleos a lo largo del año 2010 y permitirá la prestación de dicho servicio a más de 3.200 personas de toda la provincia.
El presidente de la Diputación, Francisco Pulido, subrayó ayer que estas cifras evidencian que "se cumple con un gran reto", que supone un "importante yacimiento de empleo" y que ha ido aumentando su presupuesto desde los 4,5 millones de euros del 2008, pasando por los más de once millones del 2009, hasta los 15.853.128 euros previstos para el 2010. Del mismo modo, resaltó que el servicio provincial de ayuda a domicilio "ha hecho posible que se organicen más de 50 empresas". Pulido expresó su compromiso con los ayuntamientos en la formación de una red de atención e hizo hincapié en que "la provincia está dando un buen ejemplo en la atención a personas con alguna discapacidad y de cómo las administraciones tenemos que responder a las necesidades que existen".
Finalmente, destacó que las políticas sociales y la ayuda a domicilio son una prioridad para la institución provincial, de ahí la celeridad con la que, según el presidente, fue aprobado en el Pleno de la semana pasada el convenio que ayer rubricó con alcaldes y concejales de 67 municipios y dos entidades locales autónomas (ELA) de la provincia.
Este convenio exime a los ayuntamientos de la aportación económica para hacer frente a los programas de Envejecimiento Activo y Saludable que se desarrollen en su municipio, pasando a ser gestionados directamente por el IPBS.
La delegada de Servicios Sociales de la Diputación y vicepresidenta del Instituto Provincial de Bienestar Social, Reyes Lopera, argumentó que con este servicio "consolidamos un derecho de los ciudadanos y aumentamos la lista de derechos individuales, ayudando a crear un sistema de protección que se suma a la educación, la salud, las pensiones o la seguridad social".
