La Red Andaluza de Lucha contra la Pobreza y la Exclusión Social (EAPN) presentó este lunes, con motivo del Día Internacional para la Erradicación de la Pobreza que se celebra el 17 de octubre, el 12º informe sobre el estado de la pobreza en la comunidad en base a los indicadores marcados por la Agenda europea 2030, el primero que elaboran desde que empezó la pandemia.
Entre los colectivos que analiza el informe, figura el de los pensionistas, un grupo con características especiales que generalmente tiene en la pensión su único ingreso por lo que, destacan, «su situación de pobreza depende de decisiones políticas y en ningún caso de su esfuerzo personal. De las 1.610.265 pensiones que se ingresan en Andalucía, el 41,3 %, es decir, bastante más de un tercio del total, reciben una pensión cuyo importe es inferior al mínimo considerado para no ser pobre. En términos absolutos, 664.470 personas -unas 89.000 menos que el año anterior. Además, el 56 % de las pensiones de viudedad, la inmensa mayoría correspondientes a mujeres, tienen un importe inferior al umbral de pobreza y, aunque relativamente son pocas, el 80,2% de las pensiones de orfandad tienen un importe inferior al umbral de pobreza.
La situación varía según las provincias. Así, Cádiz, con el 34%, registra el menor porcentaje de pensiones bajo el umbral de pobreza, mientras que Córdoba, con casi 12 puntos porcentuales por encima, es la que tiene el dato más alto (45,7%). Además, Almería, Córdoba (19%)y Granada destacan por su alto porcentaje de pensiones bajo el umbral de pobreza severa.
Si se analizan las pensiones según el sexo de la persona que las recibe, los porcentajes de pensiones recibidas por mujeres cuyo importe está por debajo del umbral de pobreza duplican ampliamente a las percibidas por los varones. Para el año 2021 el 48,1 % de las pensiones recibidas por mujeres tienen un importe inferior al umbral de pobreza frente al 21,7 % medido para los varones. En el caso de la pobreza severa, la relación es similar y los porcentajes alcanzan al 22,2 % de las pensiones recibidas por mujeres y del 9,7 % en los varones.
La pobreza aumentó en 2021 en Andalucía, hasta alcanzar actualmente a 3,27 millones de personas que se encuentran en riesgo de pobreza y/o exclusión social, muy por encima de la media nacional. El documento expone que en 2021, el 38,7% de la población de Andalucía estaba en riesgo de pobreza y/o exclusión social, lo que supone un incremento de 1,8 puntos respecto al año anterior.
En la presentación de los datos, la vicepresidenta de EAPN Andalucía, Susana García, aportó las diferentes cifras que remarcan la situación de desventaja que ocupa la comunidad.
Más emigración que inmigración
Los indicadores analizados se basan en datos del año 2021, en el que el flujo de emigraciones en Córdoba superó al de inmigraciones. Así, la cifra total de población extranjera con certificado de registro o tarjeta pasó de 32.517 a 33.900 en un año, siendo la nacionalidad europea la más abundante, seguida por la de personas de origen americano. Al mismo tiempo que el volumen de personas extranjeras creció levemente, la cifra de empadronados en Córdoba que emigraron aumentó en 2020 y en 2021. Durante el año 2020, se produjeron 14.075 inmigraciones frente a las 14.291 emigraciones de cordobeses, lo que supone un saldo migratorio de -216, siendo Córdoba la única provincia andaluza con saldo negativo.
El dato fue aún más llamativo en 2021, cuando esta diferencia de saldo migratorio fue en aumento, con -2.020, ya que las inmigraciones fueron de 13.912, descendiendo levemente respecto al año anterior, y se contabilizaron 15.932 emigraciones. En el capítulo de empleo, el informe subraya que en Córdoba, los tipos de contratos más utilizados para emplear a los trabajadores siguen siendo por obra y servicio y eventual por circunstancias de la producción, dos modalidades de empleo más inestable que acaparan más del 90 % de la contratación provincial. También destaca como dato positivo un incremento de un 106,70% en los contratos temporales convertidos en indefinidos.
