Vecinos del Casco Histórico, bajo la convocatoria de la asociación vecinal La Axerquía, se han concentrado este lunes en la plaza del Potro ante los últimos acontecimiento acaecidos en la Ribera, en los que un grupo de jóvenes trepaba por una de las viviendas de la calle Lineros tras ser increpados para que bajaran el volumen. Este hecho, ha explicado Blanca Toscano, vecina de la zona e integrante de la asociación, no es puntual, y ha asegurado que las concentraciones de jóvenes a altas horas de la madrugada se repiten todas las semanas.
Según Toscano, "no se respeta nada" y entiende que ahora "la moda es venir aquí", teniendo en cuenta los varios locales de ocio nocturno, así como restaurantes, que hay al lado del río. Entre las molestias destacan el ruido que se genera o la suciedad (alertan de manchas de orines en las calles). Toscano ha señalado directamente a los hosteleros, a quienes ha pedido que cumplan con la normativa. Son varios los vecinos que denuncian que la música no cesa cuando tiene que hacerlo y que también se producen concentraciones en las puertas de los locales para beber.
Es más, la integrante de la asociación La Axerquía ha asegurado que ya han hablado con Bodegas Campos y que desde la empresa hostelera se han comprometido a controlar más el ruido o la gente que sale y entra del restaurante.
Según Toscano, todos estos hechos se han puesto en conocimiento de la Policía Local con varias llamadas y ha pedido la intervención de la Delegación de Seguridad del Ayuntamiento para poner solución a un problema, ha añadido, que se repite "desde hace seis o siete años". Desde la asociación entienden que es normal que el Casco se esté vaciando de vecinos ante unas molestias que van desde "aporrear las puertas" hasta gritos a altas horas de la madrugada.
La solución pasaría, proponen, por declarar a esta parte de la ciudad como Zona Acústicamente Saturada (ZAS), algo que ya se hizo con la Corredera o con la calle Alfaros. El hecho de que una zona sea declarada ZAS provocaría, entre otras cosas, que se pudiera poner coto a la apertura de nuevos locales de hostelería.
"Es vergonzoso lo que hay que aguantar"
Una de las vecinas de la calle Lineros ha denunciado que "es vergonzoso lo que hay que aguantar" en la zona a raíz de quienes van a locales nocturnos y luego no respetan el derecho al descanso. Esta vecina, que prefiere no dar su nombre, asegura que en más de una ocasión ha llamado a la Policía para denunciar los ruidos que genera, por ejemplo, Bodegas Campos, sin que se haya puesto solución.
Otra vecina, hermana de la dueña del piso escalado, ha detallado que su familiar está muy delicada de salud y que hechos como los de la pasada semana son más comunes de lo que parece. Con ello, también ha pedido más vigilancia policial para evitar lo ocurrido hace unos días.
