La titular de un juzgado de Primera Instancia de Córdoba ha autorizado la vacunación contra el coronavirus de una residente de un centro de mayores de la capital al negarse ésta a someterse a la inmunización. La razón expuesta para esta decisión es que la mujer se encuentra incapacitada para decidir voluntariamente.

Según se expone en el auto judicial, fue la directora de la residencia la que acudió a la justicia para poner en su conocimiento que una de las residentes se negaba a recibir la vacuna y que la misma sufría una "presunta incapacidad para decidir voluntariamente debido a su deterioro cognitivo".

Tras conocer el informe del médico forense, la jueza ha determinado la autorización a vacunar a la señora ya que conlleva "importantes beneficios" para la salud de la misma y que de no hacerlo "se derivaría un riesgo inaceptable para la salud del resto de usuarios así como para las demás personas que trabajan en el centro".

En el auto se expone además que la residente sufre una serie de patologías, como cirrosis hepática, hipertensión, u obesidad, entre otros, mientras que no se recogen en su historial médico antecedentes de reacciones alérgicas a vacunas u otras sustancias. El forense ha determinado que "en el estado actual existe una afectación importante de la autonomía personal y de la capacidad de comprender y de actuar con libre determinación, lo que origina una inaptitud para emitir un consentimiento válido en relación a cuestiones relacionadas con su salud".

Por otro lado, se ha emitido otro auto en el mismo sentido, pero en este caso, la negativa a recibir la vacuna venía de parte de las hijas de una residente. De nuevo fue la directora de la residencia de mayores la que pidió amparo a la justicia después de que las hijas de una residente se negaran a que su madre se pusiera la vacuna porque "le sientan mal muchos medicamentos o la vacuna de la gripe".

De nuevo la magistrada obliga a vacunar a la mujer, entendiendo que la inmunización le conlleva importantes beneficios para su salud y que, de no hacerlo, "se derivaría un riesgo inaceptable para la salud del resto de usuarios así como para las demás personas que trabajan en el centro".