Francisco Solano Márquez: "Este año sin concurso la prensa lo suple con un buen despliegue"

-Cuando Los Patios estaban lejos de ser Patrimonio de la Humanidad, a usted ya le contaban entre los primeros periodistas que miraban más allá de lo festivo, a los muchos aspectos antropológicos, culturales, socioeconómicos... ¿Hemos tardado demasiado en darnos cuenta de su valor?

-Aunque no me reconozco en la afirmación inicial que hace, creo que los patios siempre estuvieron ahí, como recintos herederos de romanos y árabes, formando parte de la forma de vivir de los cordobeses, fuese en palacios o en casas de vecinos. Pero en los últimos años, a partir de su Declaración Patrimonial, han ganado en fama y proyección exterior, aunque con la contrapartida de una excesiva masificación que impide su disfrute sosegado por los cordobeses.

-Y paradójicamente, ahora parece que hay una cierta ‘masificación’ no solo en la afluencia a Los Patios, también informativa. ¿Sabemos comunicar, informar bien sobre esta fiesta?

-La masificación o abundancia de información sobre los patios a que se refiere no creo que sea perjudicial, pues cuanto más se hable y escriba de ellos, más vivos y presentes estarán en la admiración de las gentes. El reflejo de los patios en los medios de comunicación y en las guías anuales ha ganado con los años en calidad informativa y fotográfica, sobre todo desde la incorporación del color por la prensa, que los muestra en todo su esplendor floral. Una presencia que está a años luz de aquellos lejanos tiempos en que había escasa información sobre el concurso y además se ilustraba con fotos en blanco y negro, lo que hoy sería inconcebible. Además este año sin concurso la prensa lo suple con un buen despliegue informativo y visual.

-El próximo año es la edición del Centenario del Concurso Municipal de Patios. ¿Cómo deberíamos contársela al mundo?

-En efecto, si damos por seguro que el primer concurso municipal de Patios, Balcones y Escaparates, que así se llamaba, tuvo lugar en mayo de 1921, dentro de un año celebraremos su centenario si el maldito coronavirus y sus consecuencias lo permiten. Pero la participación fue tan escasa -tres patios- que solo se convocó aquel año y hubo que esperar a 1933 para reanudarlo con continuidad. En el centenario del concurso creo que habría que insistir en que la Fiesta de los Patios es mucho más antigua y aprovechar la efemérides para rendir un gran homenaje a sus cuidadores de siempre.