Las elecciones municipales del 26 de mayo también implicarán que, meses más tarde, se renueven los órganos de participación ciudadana ante el Ayuntamiento, un proceso que comenzará por los consejos de distrito para culminar con el Consejo del Movimiento Ciudadano (CMC), el máximo órgano de participación reconocido por la administración local junto con el Consejo Social.
El proceso no es rápido tras las elecciones. Hay que revisar el censo de colectivos en cada uno de los 14 distritos (suponiendo que para entonces no haya un distrito más, el distrito industrial para el que existe un proyecto), convocar a los colectivos de todo tipo y por sectores a la reunión y proceder a la renovación de los representantes. Al final, el proceso, que en ocasiones pasadas ha durado más de un año, culminará con la renovación del CMC, con representación de los 14 consejos de distrito, la federación de asociaciones vecinales Al-Zahara y una veintena de consejos sectoriales de la ciudad.
Este proceso no siempre ha sido sencillo, y al respecto cabe recordar los conflictos que se registraron entre el año 2011 y 2012 en la renovación de consejos de distrito comenzando por el censo de colectivos activos en cada zona. La situación fue especialmente difícil y conflictiva en los distritos de Trassierra, El Higuerón y Villarrubia.
