El Sindicato Médico Andaluz (SMA) en Córdoba reclamó ayer a la Delegación de Salud de la Junta que cumpla con la promesa que realizó hace una década para que se habilite un tercer punto de urgencias extrahospitalarias en la Fuensanta, que se sumaría a los dos actuales, el del centro Carlos Castilla del Pino y el del Sector Sur. Según este colectivo, «este proyecto lo prometió en el 2008 la entonces delegada de Salud y actual viceconsejera de Salud, María Isabel Baena, pero nunca se llegó a realizar, a pesar de que permitiría contar con un triángulo asistencial que diera cobertura a toda la capital, pues la zona de Levante, Lepanto y Fuensanta está menos cubierta».

El Sindicato Médico resalta que «antes del verano el Servicio Andaluz de Salud (SAS) implantó los llamados protocolos de coordinación de la asistencia extrahospitalaria urgente y emergente del sistema sanitario público andaluz, que ha complicado el trabajo y causa sobrecarga laboral en los profesionales. Según la nueva reorganización de urgencias y emergencias, el nuevo protocolo asigna a los equipos del 061 la atención de casos calificados como urgentes (prioridad dos), que pueden esperar un máximo de 40 minutos, en aquellas situaciones a las que no puedan acudir los equipos de atención primaria y dispositivos de cuidados críticos (DCCU)».

El SMA expone que «el déficit de plantilla sistémico con el que fueron creados los Dispositivos de Cuidados Críticos y Urgencias (DCCU) está dando lugar a acúmulos de pacientes en las urgencias hospitalarias y extrahospitalatarias, sin haber empezado el frío ni la gripe. Esta falta de profesionales se va a agudizar aún más debido a que la plantilla de los servicios de urgencias hospitalarias y extrahospitalarias tiene una media de edad que supera los 45 años, no se cubren esas jubilaciones, bajas o vacaciones. Los DCCU cuentan hoy solo con dos equipos de sanitarios para las urgencias, uno para avisos y otro para la atención de urgencias en el centro, absolutamente insuficientes para la demanda actual».

«FRACASO» / El sindicato insiste en que «este nuevo protocolo para la atención sanitaria de emergencias y urgencias nace abocado al fracaso sin un tercer punto de urgencias en la Fuensanta, incluida una tercera ambulancia en los DCCU, y puede provocar situaciones de riesgo en la asistencia urgente».