María De la Paz Aguilar, fruto de una meteórica carrera, tuvo que cambiar su añorada Córdoba por Nyon, una ciudad que desprende el aroma a prosperidad y dinero de Suiza, pero que no atesora la alegría ni la historia de la urbe cordobesa. En Nyon está la sede de la UEFA (Union of European Football Associations), que para los no entendidos en fútbol es la institución encargada de organizar competiciones tan importantes como la Eurocopa, Champions o Europa League. A sus 33 años, De la Paz Aguilar trabaja allí como coordinadora de la Unidad de Operaciones de Clubes y desde septiembre será la UEFA VSSM (jefa de servicios para los patrocinadores) en Champions League, para los partidos que el Sevilla FC juegue en casa. La relación con el deporte de esta joven (que nació y creció en el barrio de Ciudad Jardín) no se limita al fútbol europeo. Gracias a su titulación en Traducción e Interpretación, la posterior especialización en Interpretación Deportiva y a los cinco idiomas que domina tuvo la oportunidad de trabajar como intérprete también en las Olimpiadas de Atenas del 2004 y en el Mundial de Sudáfrica del 2010.

--¿Ha estado su familia relacionada de algún modo con el mundo del deporte?

--No directamente. Sin embargo, en casa siempre se ha visto atletismo, baloncesto, ciclismo y fútbol. Mis padres (José María y Julia) quisieron que mi hermano José María y yo practicásemos deporte. En mi caso, empecé con la natación a los 3 años.

--¿Imaginó de niña que podría trabajar y disfrutar a la vez gracias al deporte rey?

--Desde pequeña, los idiomas me llamaban mucho la atención y jugaba al fútbol en los recreos del colegio con 11 años. Nunca pensé que más tarde podría unir esas dos pasiones.

--¿Con qué edad empezó a aprender los 5 idiomas que habla, incluido el español?

--A los 11 años me apunté a una academia de inglés y en la carrera cursé francés. En el instituto López Neyra, donde estudié, tuve la suerte de participar en tres intercambios con Inglaterra. El italiano lo aprendí con una profesora mientras viví en Inglaterra y el griego moderno lo hablo porque soy una apasionada de Grecia, de su cultura y gente.

--En las Olimpiadas de Atenas, la ciudad del espíritu olímpico por excelencia, trabajó para el Comité Olímpico Internacional. ¿En qué consistió su trabajo y a qué deportistas conoció?

--Me licencié en junio del 2004 y los Juegos Olímpicos fueron en agosto. Fue muy especial porque era mi primera experiencia como intérprete. Mi labor era la de intérprete en las ruedas de prensa de los entrenadores y jugadores de las selecciones nacionales de Argentina, México y Costa Rica. Recuerdo interpretar en Atenas a Marcelo Bielsa, Ricardo La Volpe y al jugador argentino Gabriel Heinze. En esas olimpiadas Argentina ganó el oro en fútbol.

--Trabajó a su vez en el mundial de fútbol de Sudáfrica. ¿Fue testigo del gol de Iniesta que le dio a España el campeonato?

--En Sudáfrica volví a trabajar como intérprete, en este caso de periodistas de habla española. Pero por trabajo tuve que volver a España sin que hubiera acabado el mundial y el gol de Iniesta lo vi por televisión en Córdoba. Aún me emocionan las imágenes. Si te gusta el fútbol, vivir un mundial a pie de campo es una experiencia extraordinaria.

--¿Qué le impresionó durante su estancia en Sudáfrica?

--No me alojé en hotel, sino en casa de una familia sudafricana, en la zona de Soweto, construida en los años del apartheid . Recuerdo con bastante admiración mi bautizo por el rito zulú. Una noche la señora con la que me alojaba me llevó a una cabaña donde me dijo que me bautizarían porque para ellos era un regalo que hubiese llegado a su casa. Tuve que tomar una especie de bebida, directamente de una olla, y después me dieron el nombre de Noluthando, que significa "mujer que da amor".

--Ahora trabaja como Ticketing Specialist de la Champions League, Europa League y partidos de clasificación para la Eurocopa del 2016.

--Soy la responsable de las entradas durante la temporada de esas tres competiciones. La UEFA tiene un número de entradas asignadas a varios sectores: televisiones, patrocinadores, trabajadores, entre otros. Mi labor es redistribuir esas entradas, según la asignación a nivel contractual, y efectuar toda la conexión entre esas partes y nuestra organización. Además, coordino la Unidad de Operaciones de Clubes y desde septiembre seré la UEFA VSSM (jefa de servicios para los patrocinadores) en Champions League para los partidos que el Sevilla FC dispute en su estadio.

--¿Fue muy difícil entrar a trabajar para la FIFA? ¿Tiene contratadas a muchas mujeres?

--En el 2011 se presentaron 200 personas para poder hacer el prestigioso programa de gestión deportiva de la FIFA. Y en la selección a nivel mundial escogieron sólo a 29. Fui la única española elegida en esta promoción y mis otros compañeros procedían de todo el mundo. Este programa, designado por la revista SportBusiness International como el mejor de gestión deportiva del mundo, fue el paso previo para iniciar mi actual trabajo en la UEFA, en el que empecé en el 2013. Afortunadamente, cada vez hay más mujeres en las organizaciones de gestión deportiva, aunque existen diferencias.

--¿Está mal visto en su trabajo decir que se es aficionado a un equipo u otro?

--Cuando trabajo en mi nivel, en una final, la responsabilidad de que toda la organización funcione, de que todo salga bien, se impone sobre la pasión por unos colores. Como dice Eduardo Galeano: "Cuando el buen fútbol ocurre, agradezco el milagro sin que me importe un rábano cuál es el club o el país que me lo ofrece".

--¿Sobresaldrá pronto España en fútbol femenino?

--El fútbol femenino está cada vez más desarrollado y estoy segura de que la selección llegará lejos. La experiencia en el mundial de Canadá les ha servido para plantearse cómo quieren evolucionar y confío en que se asienten y crezcan como equipo.

--Es socia del Córdoba CF. ¿Dónde vivió el efímero ascenso?

--Pues estaba en Málaga con parte de mi familia y mi pareja. Reservé vacaciones a propósito esa semana porque jamás me habría perdonado vivirlo en Suiza. Quería hacerlo con los que me habían acompañado a ver al equipo todos estos años. Soy socia del Córdoba CF, aunque llevo cuatro años sin poder ver regularmente al equipo al trabajar fuera. Pertenecí a la peña Rafael Campanero y mantengo contacto con las peñas para sentir el club más cerca. Espero vivir pronto el próximo ascenso del Córdoba CF.

--¿Cómo se puede evitar la violencia en los campos de fútbol?

--La violencia en el fútbol tiene un antibiótico y una vacuna, que es la educación. Confío en que nuestro sistema social y educativo evolucione para establecer políticas y parámetros éticos. La permisividad en los estadios de conductas violentas, racistas o peligrosas debe reducirse desde ya y muchas ligas están trabajando muy duro para lograrlo. Pero no olvidemos que la violencia no es exclusiva del fútbol y que esta muchas veces no es más que un resorte de lo que ocurre en la sociedad. Por tanto, es necesario ir más allá del ámbito deportivo para evitar esta lacra.

--Empezó trabajando en el sector del comercio exterior joyero y del aceite. Pero se dio cuenta de que prefería el deporte. ¿Se plantea nuevas metas?

--El trabajo de la interpretación requiere buscarse una cartera de clientes u organizaciones y depende mucho de la demanda. Quise desde el principio tener un trabajo más estable. Tras realizar cursos de exportación, trabajé en esos dos sectores. Al regresar de Sudáfrica me di cuenta de que quería dedicarme al fútbol y cuando la FIFA me seleccionó para hacer el FIFA Master pensé que era mi oportunidad. Lo dejé todo y la apuesta salió bien. Estoy muy agradecida a las dos empresas en las que trabajé pues ambas me aportaron conocimientos y habilidades que me han resultado muy útiles en mi actual trabajo.

--Fue voluntaria de la Asociación Pro Inmigrantes de Córdoba. ¿Cómo cree que podría solucionarse el drama humano que se vive frente a las costas de Italia y de Grecia con la llegada de refugiados que llegan de Siria, Afganistán o Irak? ¿La Unión Europea hace todo lo posible por solucionarlo?

--Las políticas migratorias deberían revisarse con frecuencia puesto que la realidad de muchas personas está supeditada a situaciones político económicas muy cambiantes. Es el caso de las isla italiana de Lampedusa o la griega de Kos. Los intereses nunca deberían estar por encima de las personas y la solución no puede ser la respuesta dada por Macedonia ni el muro que construye Hungría. A toda la Unión Europea le compete buscar la solución.

--También es voluntaria social de la ONU. ¿Qué implica esto?

--Estoy registrada en las secciones de ayuda humanitaria de emergencia y en deporte y desarrollo. Nos van llamando en caso de necesitarse ayuda tras catástrofes naturales o para participar en programas.

--Por otro lado, a pesar de la distancia, mantiene una relación estrecha con la UD Palmeras.

--Realizo una labor consultiva y altruista para la Unión Deportiva Palmeras. Conozco a su presidente, Germán Llamas, que está haciendo un gran trabajo en la recuperación de este club de Córdoba. Son personas muy comprometidas con su barrio y con ganas de impulsarlo a nivel social. Cuando se trabaja en organización y gestión deportiva a un nivel como el mío, tendría que ser casi obligatorio estar en contacto con equipos de estas características para estar enraizados con la realidad y vinculados con los valores más genuinos de este deporte.

--¿Qué diferencias encuentra entre Lausana, donde ha estado viviendo, y Córdoba?

--Ahora me he mudado a Nyon para estar más cerca del trabajo. Lausana y Córdoba no tienen nada en común. Suiza es un país excepcional para tener un trabajo o forjarte una carrera. Pero a nivel social, está muy lejos de lo que en nuestro país denominamos como calidad de vida. He vivido en 5 países y sueño con volver a Andalucía. España, lejos de tópicos, es un país precioso.