La solicitud de un intérprete de lengua de signos, de transporte adaptado para personas con movilidad reducida o la mejora de la accesibilidad de las webs de las asignaturas en las que se encuentran matriculados estudiantes con déficit visual, son solo algunas de las cuestiones a las que, hasta el momento, ha hecho frente la Unidad de Atención a las Necesidades Específicas (UANE) de la UCO. En total, 17 alumnos y un trabajador de la institución universitaria, que han ido dando forma al trabajo de este servicio en lo que va de curso, en base a sus peticiones.

Porque, como explica su directora, la profesora María José Pino, en la UANE trabajan a demanda, dando solución a las peticiones planteadas por los diferentes miembros de la comunidad universitaria que pueden hacer uso de la misma. Así, desde el 2007, fecha en que se puso en marcha, llevan trabajando por un mismo objetivo: superar las barreras que puedan impedir que alguien de la UCO consiga sus objetivos.

"Ante cada petición o solicitud concreta por parte de un miembro de la comunidad universitaria, intentamos buscar los recursos para que pueda cubrirse", destaca Pino. Y esto incluye un amplio abanico de servicios que va desde la asignación de los espacios docentes más accesibles para un grupo donde se encuentra matriculado el estudiante con discapacidad, hasta dar visibilidad en copistería a las listas para estudiantes con dificultad visual.

APOYO DEL ALUMNADO Para intentar dar una mejor cobertura en todos estos ámbitos, la Unidad quiere reforzar la figura Solidarios UANE , estudiantes que acompañan y colaboran con el usuario que tiene una discapacidad o una necesidad específica, proporcionándole apuntes de clase, ayuda en los desplazamientos por el campus o en el estudio. "Estos estudiantes reciben por su colaboración una compensación de algunos de los créditos de libre configuración y actividades solidarias que se contemplan en los estudios de grado pero, sobre todo, reciben la oportunidad de convivir más cerca con una persona con necesidades específicas y comprender mejor las barreras inadvertidas de nuestro sistema social", aclara la directora de la UANE.

De cualquier modo, y por motivos de confidencialidad, deben ser los estudiantes quienes acudan a la Unidad a mostrar sus necesidades. Para intentar llegar a más gente, Pino destaca que se han marcado como objetivo este curso que cuando el estudiante vaya a realizar su matrícula on-line, al marcar la casilla de discapacidad, le aparezca un mensaje indicándole la existencia de la Unidad y preguntándole si quiere que se pongan en contacto con él.

El año pasado, la Junta de Andalucía distinguió con el Premio a las Buenas Prácticas en atención a la discapacidad este servicio de la UCO.