El INE cambia la ponderación de los artículos de la cesta de la compra en la que basa su cálculo del IPC, sustituyendo algunos (por ejemplo, excluye los CD grabables e incluye discos duros y tablets) y modificando el peso de otros según las pautas detectadas en la encuesta de presupuestos familiares. Y, como ha aumentado el peso del grupo en el que se miden los precios de la gasolina, sorprende su escaso impacto en el IPC de enero. Será que ya no tenemos ni para comprar combustible.