La juez de instrucción número 3 de Sevilla, que investiga la concesión por parte de la Junta de la explotación de la mina de Aznalcóllar (Sevilla), ha aceptado la querella de Manos Limpias por dicha adjudicación y ha admitido la personación de dicho sindicato de funcionarios como acusación popular. En un auto del 22 septiembre, la juez Patricia Fernández acepta la petición de Manos Limpias de una querella por presuntos delitos de prevaricación, cohecho, fraude y tráfico de influencias por la concesión por parte de la Junta de la explotación minera. La magistrada incorpora el escrito de querella los documentos aportados por Manos Limpias a las diligencias por un presunto delito de tráfico de influencias y otros en las que se investiga al grupo Magtel --empresa que forma parte del consorcio al que se adjudicó la explotación de la mina--.