El Tribunal General de la UE desestimó ayer los recursos presentados por tres industrias desmotadoras para exigir una indemnización por la reforma de ayudas al sector del algodón del 2004, que fue revisada posteriormente tras las denuncias de España. La corte comunitaria ha dictado sentencia en la que rechaza una demanda de las empresas Sungro, Eurosemillas y Surcotton, en la que argumentaron que habían sufrido perjuicios económicos por la regulación del mercado del algodón. Dicha reforma consistió en distribuir las ayudas al cultivo algodonero de manera que un 65% se dan por hectárea se coseche o no.