El alcalde de Estepona, el socialista David Valadez, y su compañera de partido, la concejala Cristina Rodríguez, expresaron ayer su miedo por las "múltiples amenazas" que sufren desde que comenzó el caso Astapa, que investiga la presunta trama de corrupción político-urbanística en esta ciudad. Valadez y Rodríguez interpusieron en noviembre de 2006 la denuncia que desató la operación y desde el inicio de las investigaciones han sufrido presiones y "han intentado destruirnos políticamente", según reconocieron en rueda de prensa. Veladez destacó que en semanas sufrirán una campaña de desprestigio porque "a algunos les va la misma vida en ello, y quieren hacer cree que todos somos iguales".