En mayo del pasado año publicaba en esta misma sección Islero, ¿otra vez?, a propósito de la programación preparada por el Ayuntamiento a través de su delegación de Cultura con motivo del centenario del nacimiento de Manuel Rodriguez Sanchez, Manolete, bajo el lema Manolete 100 años vivo. Pues bien, terminada dicha efeméride y transcurrido un tiempo prudencial es momento de hacer balance. Destacaría las dos exposiciones en la Sala Orive Manolete 1917-2017, con su música envolvente, impresionante. A pesar de que algunos ponían en duda la propiedad del coche expuesto como supuestamente del diestro cordobés. La de Manolete ríe, a pesar de faltarle ambientación musical, magnifica. La conferencias organizadas por la Real Academia fueron interesantes y las impartidas en el Círculo de la Amistad en colaboración con la tertulia El Castoreño resultaron variadas. De la mano de la Tertulia Taurina Manolete se presentó en la Diputación Provincial el libro de Paco Laguna Villa del Río con Manolete, impreso en los talleres de la imprenta provincial y obsequiado a los asistentes. El 4 de julio, coincidiendo con el día del nacimiento de Manolete se presentó dicha obra en la Casa de las Cadenas del Ayuntamiento villarrense con inauguración de exposición fotográfica de Finezas; exposición que meses más tarde pudo verse en el Patio Blanco del antiguo convento de la Merced- sede de la Diputación Provincial. Fuera de nuestra provincia, en Alcalá la Real (Jaén) y dentro de su afamada Ruta de la Tapa, mereció mención especial la presentada por el bar Rincón de Pepe con el nombre Manolete.

En los corrales antitaurinos del Ayuntamiento quedó la placa conmemorativa que iba a colocarse en la casa natal de la calle Conde de Torres Cabrera y el Catálogo de cartelería taurina de 2017 homenajeando a Manolete. Esto último me lo confirmaron en el edificio que alberga unas instalaciones taurinas (antes Museo). Aplazado el festival del Cáncer por desidia de los toreros cordobeses y programado para el pasado mes de abril, se suspendió definitivamente. Aunque a toro pasado, en el cartel que lo anunciaba pudo dibujarse la efigie de Manolete. Nada. Hago un inciso para dar mi opinión sobre el cartel anunciador de los festejos a celebrar en Los Califas (Lagartijo-Guerrita-Manolete). Mas antitaurino no puede ser: toros «comiendo» flores. Claro que en la cocina de autor también dan de comer flores, por lo que ya no tiene sentido el dicho «eres tonto o comes flores». Pues eso.

El centenario manoletista pudo terminar con la buena noticia de que Córdoba aceptaba el legado del museo Manolete con sede en Villa del Río de acuerdo con lo manifestado por su propietario Paco Laguna en entrevista emitida el 2 de Diciembre del pasado año en el programa Tendido Cero de TVE. Creo recordar que dijo que podía morir tranquilo si su Museo se instalara en Córdoba. Hasta hoy.

¿Qué queda del centenario del nacimiento de Manuel Rodriguez Sánchez Manolete? Para mí varias cosas, a cual más importante. Manolete pervive en las tabernas, donde el vino se bebe en catavino y no en copa afrutadocerveza. Manolete sigue en el callejero aledaño a la plaza de toros y, para siempre, Manolete es Hijo Predilecto de la ciudad que lo vio nacer. Eso sí, han tenido que pasar setenta años para indultar a Islero. Porque Islero pasaba por allí. ¡Gloria a Islero!

* Abogado