El fútbol ofensivo es creatividad, talento, capacidad para inventar, para combatir al rival mediante el engaño, para todo... Es infinito, interminable. Por eso es más fácil defender que elaborar. Correr lo podemos hacer todos, elaborar y crear es más complicado, se necesita el requisito del talento, el equipo que lo tiene tendrá más opciones, el que no lo tenga tendrá serias dificultades para competir.

Al Córdoba CF no le bastó con mantener el orden y su correcta capacidad táctica, le hizo falta algo más para competir el partido y liquidarlo cuando logró desnivelar el marcador a su favor. En la alta competición no es suficiente solo el esfuerzo, hay que compensarlo con el talento.

En el primer periodo fue suficiente para combatir y contrarrestar al Getafe con orden, actitud y el esfuerzo grupal, aunque nuevamente mostró desajustes en defender su costado derecho (irregular respuesta ante las incorporaciones del lateral izquierdo Escudero), aunque sí generó peligro en acciones individuales.

En el segundo, comenzó con repliegues sobre su propio campo, pero nuevamente logró generar peligro tras recuperación del balón en segundas jugadas en campo rival (gol de Ekeng), y acciones de contragolpe. En defensa nuevamente mostró desajustes en sus movimientos de basculaciones sobre banda derecha (nueva incorporación del lateral izquierdo Escudero) en el tiempo añadido con centro final y finalización de Babá, gol, que robó la ilusión de toda la afición cordobesista que ya celebraba la primera victoria de su equipo.

Equipo unido cuando algo resulta mal: yo lo hice. Cuando algo resulta más o menos bien: nosotros lo hicimos. Cuando algo resulta realmente bien: ustedes lo hicieron.