El fútbol cordobés sigue gozando de buena salud. Los equipos dirimen sus objetivos en el inicio de cada competición. Al margen de las máximas categorías autonómicas, las ligas locales, que este año se denominan 2 Andaluza, son el máximo exponente de la rivalidad provincial.

En juveniles, el ascenso a Liga Nacional juvenil cobra un anhelo especial. El Deportivo Córdoba quiere volver a una categoría que ocupó antaño, pero le ha salido un duro competidor, el Córdoba B, pero el hecho de que el primer equipo esté en la Liga Nacional puede dar premio este año al subcampeón. Lucena, Montilla y Villafranca siguen de cerca a los dos primeros, pero en pocas semanas hay ya una brecha considerable.

Por su parte, en una de las categorías más competidas en los últimos años, en la Prebenjamín, de nuevo Séneca y Salvador Allende han comenzado fuerte y goleando. Esta vez Los Califas se ha unido al grupo y quiere irrumpir con fuerza en la zona alta. De hecho, los tres han goleado esta última jornada a sus rivales y están con 16 puntos en lo más alto de la tabla, aunque el Salvador Allende tiene un partido menos por haber cumplido ya la jornada de descanso estipulada en el calendario. Será una pugna bonita para ver quién mantendrá el tipo hasta el final.

SEGUNDA ANDALUZA FEMENINA La Segunda Andaluza Femenina tuvo este fin de semana un duelo estelar en la cabeza de la tabla entre los dos representantes cordobeses que hay disputando el ascenso. El Palomera Naranjo recibía la visita del Pozoblanco. Ambos tenían seis puntos, mientras que el resto de participantes llegaban con cero. El duelo cordobés dejaría el liderato para el Pozoalbense, que se impuso por 1-3. A los 23 minutos se adelantó Sandra, pero a los cinco minutos igualó Yaniere para las locales. En la segunda parte, Raquel a los 62 minutos y Victoria en el 68 dieron el triunfo y el liderato en solitario a su equipo.