Las quince variedades de semillas encontradas en la Cueva del Angel de Lucena sitúan al lugar como uno de los recintos más importantes de la Prehistoria en Europa. La mayoría de ellos tienen una antigüedad que los expertos cifran entre los 200.000 y 300.000 años. En rueda de prensa, el concejal de Patrimonio Histórico de Lucena, Manuel Lara, y el arqueólogo Cecilio Barroso han hecho balance de los trabajos de esta campaña, realizados en el Centro Municipal Los Santos, que han contado con un equipo formado por unos 40 investigadores.

Barroso ha destacado que entre los expertos que han acudido este año a Lucena ha estado Dorian Fuller, catedrático de la Universidad de Londres, considerado una autoridad mundial en cuanto a la investigación de los orígenes de la agricultura. Fuller ha estado trabajando en las semillas encontradas en la Cueva del Angel, resaltando que su origen es extraordinariamente remoto. Barroso ha destacado que las semillas encontradas hasta ahora en el mundo no tienen más de 20.000 años, por lo que los descubrimientos realizados en Lucena pueden revolucionar las investigaciones y contribuir de manera clave al conocimiento de cómo vivían y se alimentaban los homínidos de la época.

La Cueva del Angel cuenta, según Barroso, con el mejor equipo de investigadores junto al de Atapuerca. Entre ellos están investigadores del Instituto de Paleontología Humana y del Museo de Historia Natural de París, de la Universidad de Perpignan, del Centro de Investigación de la Prehistoria, de Tautavel y de la Universidad de Oxford y las conclusiones de estos trabajos aparecerán en las principales revistas especializadas.