El Consejo General de Colegios Veterinarios, con motivo del Día Mundial de la Rabia, que se celebraba ayer, ha reiterado en Córdoba a través de un comunicado la conveniencia de la vacunación anual y obligatoria de perros, gatos y hurones, todo ello para luchar contra "una zoonosis peligrosa, que causa gran alarma social y que puede incluso llegar a ser motivo de conflictos internacionales".

La rabia se erradicó en España en 1978, después de una prolongada campaña de vacunación de varias décadas, y desde entonces solo Ceuta y Melilla registran casos esporádicos de la enfermedad. Pero el pasado mes de junio se confirmó el ataque de un perro infectado a cuatro niños y un adulto en Toledo, "circunstancia que reafirma nuestra preocupación por la posible reinstauración de la enfermedad en nuestro país", afirman los veterinarios.

El riesgo principal, explican estos expertos, está relacionado con la movilidad creciente de personas y animales entre Europa y los países del norte de Africa, en los que la rabia es una enfermedad prevalente, particularmente en el medio rural. "España es un país de paso obligado de vehículos, particularmente masivo en algunas épocas del año" y, aunque se realiza un gran esfuerzo de vigilancia y control en los puestos fronterizos, hay que tomar otras medidas imprescindibles como ya citada de la vacunación.