Reconocí la casa de Pepe Córdoba nada más verla. Situada justo en frente del cuartel de la Guadia Civil de Cabra, mostraba en la acristalada puerta de entrada todo tipo de recortes y fotografías del dueño de la vivienda, un hombre sencillo y cariñoso que siempre que puede presume de ser uno de los personajes más queridos de su pueblo. Lo avalan años de entrega a la organización de la romería llamada de los gitanos, de la que fue fundador y que este año cumplirá 43 años de trayectoria. Una cita obligada del mes de junio que le ha hecho merecedor de varios premios, entre los que ocupa un lugar especial el que recibió, de manos de su paisana y ex ministra de cultura Carmen Calmen, concedido por el Instituto de Cultura Gitana.

Me abre la puerta Josefina, la mujer de José, o de Pepe, como a él le gusta que le llamen. Sin perder un minuto, Josefina me ofrece algo para beber y, abrumada por la cantidad de fotografías que pueblan las paredes del salón de la casa, acepto un vaso de agua mientras Pepe adivina mi curiosidad y se decide a ponerme al día sobre el museo de imágenes que me rodea. "En esta foto estoy con el actor Fernando Sancho, en la que hay colgada allí (señala con su bastón) me puedes ver con Chaves, el ex presidente de Andalucía, este niño tan guapo (su foto aparece bajo el cristal de la mesa camilla) es uno de mis nietos..." La lista de nombres es interminable y Pepe, a quien la artrosis le hace difícil mantener el equilibrio, confirma que su memoria se mantiene a prueba de bombas.

--¿Cuántos premios le han dado a lo largo de su vida?--He perdido la cuenta de cuántos premios he recibido ya, estoy desbordado, pero he de reconocer que este último me ha hecho especial ilusión. Aprovecho para darle las gracias a mi querida Carmen Calvo porque hay que tener ese arte que ella tiene para hincarse de rodillas, como ella hizo el otro día, para darle un premio a un gitano como yo. La quiero con delirio a ella y a su hermano Pepe.

--Usted lleva toda la vida predicando que los payos y los gitanos deben llevarse bien. ¿Cree que las cosas han mejorado con el paso del tiempo?--En Cabra sí, pero la leyenda negra no acaba nunca. Yo he dicho tantas veces: "pero ¿no venimos todos de Adán y Eva? ¿Y cuál era el gitano?". Pues eso, que todos somos hermanos...

--¿Qué significa "ser gitano" hoy en día, en su opinión?--Antes se conocía a un gitano porque iba de pueblo en pueblo, con la casa a cuestas, porque los iban mandando de un lado a otro, pero eso ya no es así. Me da coraje que se hable de integración cuando sigue habiendo recelo a la hora de dar trabajo a un gitano, por ejemplo. Y el que prueba y le da un puesto a un gitano dice: "pero si esto es azúcar", pero si no le habéis dado facilidad... Y te digo una cosa, a la gente hay que juzgarla por lo que es individualmente. Yo soy el primero que no quiero a una mala persona a mi lado, sea paya o sea gitana, pero antes de hablar de alguien hay que conocerlo. Mira, mi hermano Andrés se fue de joven a trabajar a Alemania, ¿verdad? (Andrés, que está sentado junto a Josefina durante la entrevista, escuchando atentamente lo que dice su hermano, asiente a la pregunta). El día antes de irse, le fiaron un conejo para el viaje y con la primera paga que cobró en Alemania mandó el dinero del conejo. Todavía se acuerda de aquello y guarda el ticket el que se lo fió.

--Cuando fundó la romería de los gitanos de Cabra, su prioridad era dar de comer a la gente, ¿no es así?--Sí que es verdad. Yo desde chico subía al santuario y como tenía la suerte de que yo cantaba, los señoritos y la gente me daban para comer. Y cuando salía a la calle y veía a la gente blanquita, muerta de hambre, subir andando a ver la Virgen, pensé que lo primero que tenía que hacer en la romería era darle a la gente de comer.

--¿Con qué edad empezó a trabajar?--Con doce años. Empecé cantando con la Niña de los Peines y luego trabajé como artista por mi cuenta. Después, me fui a Barcelona, a cantar en salas de fiesta, pero al cabo del tiempo me di cuenta de que me tenía que volver a mi tierra, porque el pueblo tira mucho. Yo nunca he sido persona de cantarle a un señorito y esas cosas. Mientras había actuaciones en teatro, bien, cuando no, a Cabra, a buscarse la vida honradamente de otra manera. Aquí monté la cofradía del Cristo de los Gitanos, que tuvo un éxito exagerado. Aquí nació también la Misa Gitana de los Hermanos Córdoba, en el año 1965, y nos llamaron para que fuéramos a cantarla a Roma. En El Vaticano, se me ocurrió lo de fundar la romería y, a la vuelta, hablé con el hermano mayor. Y hasta hoy.

Misa Gitana

--¿Quién le enseñó a cantar?--Mi padre y mi madre, ellos dos cantaban que quitaban el sentío . Y ahora tengo quince o veinte artistas más en la familia.

sentío

--¿Recuerda la primera romería?--Hay una anécdota que he contado muchas veces. Cuando se enteraron de que iba a celebrar una romería, me llamó un sargento para decirme que si hacía falta guardia civil por el tema de la seguridad. Yo dudé al principio, pero luego pensé ¿y si hay un metepatas? Conviene que haya un respeto a la autoridad y le dije que sí. En aquel entonces, me enteré después, que en la Guardia Civil había un artículo que decía que había que odiar a los gitanos antes de ponernos la ropa por mandato de Franco. Ese artículo lo quitaron.

--Su familia debe ser grande...--Nosotros éramos doce hermanos, pero ya solo quedamos nueve y de los varones, éste (Andrés) y yo. Luego yo estuve casado treinta años con una payita, la paya se murió y me dejó dos hijas. Luego me casé con Josefina, que es medio paya y medio gitana ("pero era mocita", replica su hermano). Ella me dio dos hijas más. Ahora tengo 25 nietos y unos cuantos bisnietos.

--Eso de ser "mocita" antes de casarse sigue siendo importante. Una mujer divorciada, por ejemplo, nunca podría casarse con un gitano...--No. Hombre, para todo hay apaño, pero no. Lo nuestro es eso. Las cosas se hacen así.

--¿Usted cómo lo ve, Josefina?--Yo lo veo muy bien. La mujer tiene que ser mocita al casarse.

--Ya han pasado muchas personalidades por la romería, ¿falta alguien todavía por venir?--Las autoridades a mí me dan igual, yo quiero que vengan artistas, cuantos más, mejor. Este año, ya me han confirmado que viene David Peña, pero faltan muchos por venir, así que desde aquí los animo a todos.

--¿Cuáles son los cantaores a los que usted más admira?--A Camarón y a Antonio Mairena, ésos son los que mejor han cantado flamenco del mundo.