El agua es muy tozuda y donde tiene que estar, va a estar", sentenció ayer el alcalde, Andrés Ocaña, al hablar de las zonas afectadas por la crecida del río, todas ellas calificadas en el PGOU como inundables. Así que tras las inundaciones producidas en las parcelaciones ubicadas en estos terrenos, todas ilegales, señaló que lo ocurrido es "una llamada de atención sobre algo que ha costado trabajo asimilar", que no es otra que el riesgo que corren estas construcciones y que imposibilitan su regularización. "Es una lección de la que deberíamos aprender todos", dijo.

Ocaña, que agradeció la colaboración de los vecinos afectados al entender las "especiales circunstancias que vivimos" a causa de la "magnitud relevante" del caudal del río, señaló que las zonas críticas son "inundables, lo que impide su legalización", aunque aseguró que cuando las aguas vuelvan a su cauce los desalojados "tendrán derecho a volver a su casas". En esta línea, el alcalde explicó que las inundaciones "en ningún caso" van a incidir en las calificaciones urbanísticas marcadas en el PGOU.

De su lado, el portavoz del PP en el Ayuntamiento de Córdoba, José Antonio Nieto, que visitó ayer algunas zonas de la ciudad afectadas por las inundaciones, anunció que se pone a disposición del alcalde para colaborar en solventar los problemas generados por el temporal, aunque también criticó que no se limpiaran antes los cauces.

Nieto manifestó su "apoyo, personal y político, al alcalde de Córdoba, para aquello que haya que desarrollar", en cuanto a "las medidas urgentes" que deban adoptarse en estos momentos, aunque también dijo desear que no fuese necesario tomar ahora dichas medidas, "a toro pasado". Nieto consideró que debió haberse dado prioridad a la limpieza y canalización de los cauces de arroyos que ahora se han desbordado.

Por último, el PSOE valoró positivamente "el esfuerzo de coordinación" que están realizando tanto la Junta y la Administración del Estado como el propio Ayuntamiento para "dar respuesta a una situación excepcional" que "por las lluvias incesantes y el desembalse obligatorio de los pantanos ha provocado la crecida del río Guadalquivir y todo este caos de inundación".

Sobre las declaraciones realizadas por el presidente del PP de Córdoba, José Antonio Nieto, Juan Pablo Durán dijo que "o son de alguien que es un político miserable que busca rédito ante la angustia de la gente o de un perfecto ignorante de lo que está pasando", pues "no se explica que quiera achacarle a los cauces de los arroyos el desalojo de decenas de familias a lo largo de todo el Guadalquivir desde del Villa del Río hasta Palma".