Después de tres años y cinco meses de cárcel, el dirigente opositor Leopoldo López comenzó a cumplir un arresto domiciliario por cuestiones de salud. El Tribunal Supremo de Justicia (TSJ) dijo haber abandonado su pasada intransigencia por razones «humanitarias». Voluntad Popular (VP), el partido desde el cual ejercía su liderazgo desde la prisión, aseguró que el chavismo se vio obligado a tomar esa decisión como consecuencia de las protestas que sacuden Venezuela desde abril pasado y que han dejado decenas de muertos.

La Sala Penal del Tribunal Supremo de Justicia (TSJ) no solo tomó en cuenta las dolencias que padecía López sino la existencia de «irregularidades» en el proceso de condena.

En la salida de prisión ha tenido un papel muy importante el expresidente español José Luis Rodríguez Zapatero, que medió con las autoridades y que se reunió con el presidente Nicolás Maduro horas antes de la salida de prisión del opositor. Zapatero calificó de «paso muy positivo» la salida de la cárcel de López. El presidente del Gobierno español, Mariano Rajoy, celebró también que el líder opositor se encuentre en su casa y reconoció la labor de Zapatero. «Ha estado muy activo. Es justo decir que ha contribuido y que ha hecho todas las gestiones con el ánimo de construir», añadió el presidente.

Leopoldo López Gil, padre del dirigente de VP, consideró que la liberación de su hijo «es un cambio de rumbo que significa mucho para todo el país». López Gil, quien se encuentra en España, reveló que a su hijo «le pusieron un brazalete electrónico. Fuera de eso no sabemos otra limitación».

Desde hace semanas corría por Caracas el rumor sobre el otorgamiento del arresto domiciliario a López. El pasado 23 de junio, Lilian Tintori, esposa del líder de Voluntad Popular, difundió un vídeo de 26 segundos en el que López grita que está siendo torturado por sus carceleros. «¡Denuncien, denuncien! Lilian, denuncia», se escucha en esa grabación tomada desde lejos.

13 AÑOS Y 9 MESES DE CÁRCEL / López había sido llevado a la cárcel militar de Ramo Verde en febrero del 2014. En septiembre del 2015 lo condenaron a 13 años y 9 meses de prisión por su supuesta responsabilidad en los hechos violentos que desencadenaron las protestas contra el presidente Nicolás Maduro tras su asunción, y que costaron la vida de 43 personas. «Les reitero mi compromiso de luchar hasta conquistar la libertad. Pueblo de Venezuela, que este paso se convierta en mayor convicción, y en ese sentido reiteramos, a 100 días de la resistencia volvamos a la calle a luchar», dijo ayer Leopoldo López a través de una carta.