El Instituto Andaluz de la Juventud (IAJ), junto a la Consejería de Educación, Cultura y Deporte y la de Salud y Bienestar Social, lleva desarrollando desde 2001-2002 un programa de formación para los jóvenes, que comenzó centrado en la salud. Uno de sus objetivos, en este ámbito, son los centros de secundaria, además de universidades o asociaciones juveniles, con los que se trabaja fundamentalmente en cuatro áreas: estilos de vida saludables, sexualidad y relaciones afectivas, salud mental y convivencia.

El programa promueve hacer activos a los propios jóvenes en el fomento de estas buenas prácticas, sobre las que les proporciona una formación específica.

Esta iniciativa es un ejemplo más de las múltiples funciones que presenta la figura del alumnado ayudante, que en este caso no sería posible sin la colaboración interinstitucional y sin la implicación del centro para alcanzar el éxito del mismo.