El Adesal ha igualado una gesta que anteriormente consiguieron otros conjuntos femeninos de la provincia en voleibol, fútbol sala y tenis de mesa. El Cajasur de voleibol selló su entrada en la élite el 24 de abril del 2004 al vencer por 3--0 al Covadonga. Rafa Vargas era el entrenador de aquel equipo que lideraron jugadoras como Lorena Weber, Marta Fraile o Samanta Santamaría. Este conjunto aguantó dos temporadas en la máxima categoría hasta bajar en el 2006.
El Adecor de voleibol también logró la entrada en la Superliga, en esta ocasión al superar por 3--1 al Compañía de María en un encuentro que se celebró el 23 de abril del 2005. Rafa Llamas dirigió a un conjunto que tenía a Sabrina Seguí y Elena Domínguez como jugadoras destacadas. Las azulinas solo estuvieron un año en la categoría de oro del voleibol nacional, pues al final de la temporada vendieron su plaza. En su única participación en la Superliga disputaron las eliminatorias por el título.
Un tercer ascenso obtuvo el Cajasur Deportivo de fútbol sala, en esta ocasión el 12 de junio del 2005 al vencer por 9--4 al Funeraria Apostol en el pabellón del Guadalquivir. Antonio Infantes entrenó a aquel conjunto que contaba con jugadoras como Ampi, Sarita o Inma Baena. El Cajasur, que llegó a ganar las ligas 2008/2009 y 2009/2010 con David Díaz como técnico, abandonó la élite en el 2012 acosado por los problemas económicos.
El Cajasur Priego femenino tiene también dos ascensos en su haber. El primero lo consiguió el 26 de abril del 2009 en una fase que se celebró en Priego. Tras estar este conjunto tres campañas en la élite y llegar a disputar la segunda competición europea en el curso 2010/2011, descendió en el 2012. Sin embargo, el 27 de abril del 2013 certificó el regreso a la Superdivisión al imponerse por 2-4 a La Selva en la localidad gerundense de Báscara.
También hay que reseñar la gesta del Arycresa de fútbol sala, pues se proclamó campeón de España en junio de 1987 en Alicante. Además disputó entre los años 1987 y 1989 las dos primeras ediciones de la División de Honor de las desaparecidas competiciones de la Federación Española de fútbol sala. Fue subcampeón liguero en 1988.
No hay que olvidar a otros conjuntos femeninos que en su momento lucharon por alcanzar la máxima categoría de su modalidad deportiva. El primero que lo intento fue el Amistad Medina de voleibol que dirigió la madre del deporte femenino cordobés, Tony Arjona. Aquel conjunto disputó una fase de ascenso a la División de Honor del 29 de marzo al 1 de abril de 1975 en Valencia. Un quinto puesto obtuvo este conjunto que incluso disputó aquella campaña una eliminatoria de octavos de la actual Copa de la Reina.
La Universidad de Córdoba y el Adeba de baloncesto jugaron también eliminatorias por subir a la primera categoría. El Adeba disputó una fase de ascenso en 1997 con Alfonso Guerrero como entrenador y jugadoras como Carmen Díaz o Cristina Gómez.
La UCO luchó por subir en los años 2004 y 2005 con un conjunto que entrenaba Angel Lopera y que tenía como referentes a gente como Inma Gómez, Raquel Pérez o Carolina Gavilán.
Todos estos conjuntos femeninos dieron en su momento días de gloria al deporte cordobés. El Adesal ha cogido ahora el testigo de todos ellos aunque para ello tendrá que conseguir en los despachos los apoyos necesarios para competir con los mejores equipos femeninos. El trabajo de 16 años de este club trabajando con la élite merece que las instituciones lo ayuden. La conquista de quince títulos provinciales y un andaluz de base son el fruto del trabajo.
