El siglo XXI ya es el de la decadencia de occidente, y no hace falta que transcurra entera esta centuria para verlo. Hay un sitio curioso en Youtube que se llama La vida en un gráfico en el cual, basándose en números históricos y proyecciones a futuro de todo tipo de dato socioeconómico, se puede ver la estimación en la evolución de los diferentes países del mundo. Las gráficas son muy atractivas porque generan unas barras dinámicas que van cambiando continuamente, mes a mes, durante períodos de más de cien años (normalmente desde finales del siglo XIX hasta mediados del XXI). Uno va viendo, en segundos, la evolución y la involución de los diferentes países bajo cualquier prisma: económico, productivo, militar, sanitario, educativo, incluso en lo que se refiere al cultivo del melón, por ejemplo.

Como los datos, según se afirma en el sitio, recogen informes internacionales de la cosa, deben ser fiables o, al menos, muy ajustados a la realidad. De todas formas, los datos del pasado están ahí y no son discutibles, y los del futuro, como son a corto y medio plazo, son bastante razonables. Tras su análisis, en efecto, está clara la decadencia de occidente, y no diré, como otros, que eso no es ni bueno ni malo sino que sólo supone un cambio de paradigma, no, porque occidente, con todos sus defectos, corrupción, intereses económicos confesables e inconfesables, etcétera, aún conserva el patrimonio mundial de la libertad, de la democracia, del progreso y de la solidaridad, aun con todos los matices que se quiera, nadie es perfecto. Algunos de los datos que ofrecen las gráficas son realmente aterradores en cuanto a la evolución del peso militar y económico en el mundo en los cuales, cómo no, enormes y despiadadas dictaduras como China y otras se revelan como líderes del futuro y, ya lo sabemos, del presente. ¿Y en lo que se refiere a España?, veamos las estimaciones: de ser en 1981 la décima economía mundial en PIB nominal dentro de un ránking dominado por Europa y EEUU, pasa en 2030 al décimo quinto en una lista ya liderada por China, país que se impone en todos los demás estudios, poco a poco. Y no estamos preparados.

* @ADiazVillasenor | Escritor