El Patio Italiano, que está junto a la cocina y cafetería, poseerá acceso propio para tener independiente del resto del edificio. Esa es una de las novedades del proyecto que prepara la Junta y cuyas obras empezarán este verano. Este patio destacará por su polivalencia y porque podrá convertirse en terraza. La cubierta de teja que hay sobre las columnas desaparecerá y estas quedarán más resaltadas. Además, tendrá una cubierta acristalada a doble altura y un jardín vertical en un lateral.
La segunda fase girará en torno al Patio Mudéjar, que dejará de ser zona de paso. El proyecto contempla la colocación de pavimento de vidrio antideslizante y el cierre de su galería superior, que podrá usarse de forma independiente para eventos. El patio tendrá toldos y nueva iluminación que marcará sus arcadas.
El proyecto prevé colocar un techo de madera con luminarias integradas en la sala Ambrosio de Morales, en cuya cubierta se ha detectado amianto. En cuanto a la sala Julio Romero de Torres, que destaca por los frescos de sus paredes (que se restaurarán), contará con nueva iluminación. La idea es que tenga un uso polivalente para exposiciones, conferencias y seminarios. La filosofía de toda la intervención es la eliminación de barreras, la renovación de cubiertas para eliminar el amianto, el refuerzo de la estructura, la renovación de instalaciones y dotar de más flexibilidad a los espacios.
