El director de Medina Azahara, Alberto Montejo, lo tiene muy claro: «El Salón Rico es la joya de la corona de Medina Azahara». Por eso, la finalización de la primera fase de las obras es uno de los grandes retos que presenta la ciudad califal a corto plazo. En una entrevista a este periódico, Montejo destacó ayer que, si todo va según lo previsto, «el próximo año puede abrir el Salón Rico». Para ello será necesario cerrar el proceso administrativo para rescindir el contrato con la anterior empresa y firmar el nuevo convenio. «Los visitantes nos preguntan continuamente cuándo se podrá visitar. Queremos finalizar las obras de la primera fase y abrirlo mientras seguimos con las siguientes fases», explicó Montejo. El Salón Rico lleva cerrado nueve años, concretamente desde 2009. Construido en el siglo X, se reconstruyó en los años cuarenta del pasado siglo por Félix Hernández, completándose entre 1975 y 1982 por Rafael Manzano.

«El Salón Rico es el culmen de Medina Azahara. No sé si en el 90% del yacimiento que nos queda por excavar aparecerá algo mucho mejor, pero es la culminación de la arquitectura, de la decoración, que marcó una tendencia después», explicó Alberto Montejo. «No nos podemos permitir que una joya como ésta siga cerrado más años», añadió. De las cuatro naves de este espacio monumental de Medina Azahara solo resta por finalizar una de ellas. «Le queda el último empujón. Eso nos permitiría abrir el salón, seguir trabajando en la restauración y explicar la labor que se hace a los visitantes. Estamos en la etapa de rescisión del contrato, que hay que hacerlo despacio y muy bien», puntualizó.

Junto a la apertura del Salón Rico y las recomendaciones de Icomos, el principal reto para el yacimiento es conservar lo excavado: «Ése es el gran reto de Medina Azahara. En ello estamos, para eso están los restauradores que trabajan en el conjunto, en el mantenimiento y acudimos a empresas especializadas en restauración para hacerlo».

Montejo, además, confía en que pueda haber más sorpresas. «Solo hemos excavado el 10%. Para nosotros es un acicate esto, seguir investigando porque no deja de dar sorpresas continuamente», señaló. El director de Medina Azahara, ante la previsión del aumento de visitantes, considera que el yacimiento está «preparada» para este incremento. «Los dólmenes de Antequera han duplicado los visitantes, nosotros tuvimos el año pasado 186.000, y a partir de octubre-noviembre esperamos que comience a notarse ya la declaración», precisó.

Montejo recuerda que en el 2001, con motivo de la exposición de El esplendor de los omeyas, hubo casi 400.000 visitantes. «Creo que hay infraestructuras para ello», añadió. Solo en la tarde del lunes, jornada de puertas abiertas, llegaron más de 900 personas a Medina Azahara.